Mbappé percibirá el 70 por ciento de los derechos de imagen que produzca con el Real Madrid
El club venderá su camiseta con el número nueve cuando anuncie oficialmente su dorsal; el jugador llenará el Bernabéu el 16 de julio
El francés ha dejado mudos al PSG, al emir de Qatar y a Nasser Al-Khelaifi, que han demostrado su derrota al no brindar ni un mensaje de despedida al goleador de la entidad
El dinero no lo es todo en la vida. Kylian Mbappé se lo ha dicho en la cara al París Saint-Germain, a Nasser Al-Khelaifi y al dueño del club, el emir Tamim bin Hamad Al Thani, que han reaccionado como niños enfurruñados al no brindar siquiera una mera despedida al jugador que es el máximo artillero histórico de la entidad parisina, con 258 goles en 358 partidos.
El emir y su ayudante, Al-Khelaifi, no han encajado la derrota, acostumbrados a comprarlo todo con dinero, incluidas las voluntades. Pero los títulos, la Champions y la gloria aún no se consiguen con dólares, todavía no, y el emir y el presidente del PSG han hecho la vida imposible al futbolista desde hace un año, cuando explicó que no continuaría en el equipo qatarí afincado en París.
Arrogantes, los propietarios del club no quisieron traspasarle hace once meses, esperando una vez más convencer a su madre, Fayza Lamary, a base de dólares, a lo largo de la temporada. Esta vez el tiro les salió por la culata. Mbappé por fin impuso su criterio en la familia y dijo que se iba al Real Madrid y que mamá negociara con Florentino Pérez y José Ángel Sánchez.
Un pleito de niñatos
El 1 de julio se confirmó que no todo es dinero en la vida y el Real Madrid incluyó en su página oficial la foto de Mbappé como jugador blanco. El futbolista desapareció de la web del PSG en el mismo instante, sin un adiós a la estrella que les ha dado protagonismo durante siete temporadas.
La respuesta de los dirigentes árabes ha sido totalmente contraria. Se han negado a pagarle los 80 millones de prima de fidelidad que le deben desde el año pasado y quieren acabar con el litigio en la Justicia francesa.
El impago será analizado primero por el comité de la Liga francesa. Y si vota a favor del futbolista, como es lo lógico, pretenden seguir con el jaleo en los Tribunales parisinos. Todo ello con tal de molestar a Mbappé hasta el final, en toda su etapa madridista. Porque recurrirán y estirarán el chicle con tal de recordarle siempre a la estrella que a ellos no se les dice no. Prepotencia absoluta.
Acuérdese usted, lector, que el emir apartó a Mbappé del plantel hace un año para presionarle y renovara. No lo hizo y llegaron a un acuerdo. Kylian volvió al redil del grupo dirigido por Luis Enrique, pero desde el mes de febrero le quitaron en los segundos tiempos, le sentaron en diversos encuentros y no elogiaron sus goles. Le ningunearon. Eso le costó la Copa de Europa al París Saint-Germain, como se comenta en París.
Hoy ya es jugador madridista. Y la casa blanca le ha dicho que el litigio con el PSG no le afecte. Tranquilidad. Así será.
El número nueve puede esperar
Mbappé firmó por cinco campañas con el Real Madrid con fecha valor del primer día de julio. Su foto en la web de la plantilla es una alegría para el aficionado. También aparece Endrick, que no tiene 18 años y vendrá a España, a Valdebebas, a finales de mes, cuando los cumpla.
Kylian Mbappé y Endrick aparecen en la página de la entidad madrileña con camisetas sin dorsal. Aún no se ha hecho oficial el número de los dos delanteros y el seguidor no puede comprar todavía la camisola de Kylian con el dorsal nueve. Los 650 millones de simpatizantes del Real Madrid en todo el mundo deben esperar para adquirir la camiseta de la figura francesa con el nueve a la espalda.
La podrán comprar con seguridad el 16 de julio, fecha en la que está prevista la presentación del astro en el Bernabéu. Zidane hará los honores en un acto multitudinario que superará la plusmarca de las 85.000 personas que se reunieron para recibir a Cristiano hace justamente quince años.
La cita será un hito, pues las imágenes de Mbappé en el Bernabéu se emitirán en directo o en diferido en todas las televisiones del planeta. Cientos y cientos de millones de personas presenciarán por televisión una recepción, en el estadio más moderno del orbe, que lleva cocinándose a fuego lento nada menos que siete años.
El 30 % de los derechos de imagen
Los lectores saben que la madre del cordero de este acuerdo, muy inteligente, son los derechos de imagen que han de repartirse el Real Madrid y Kylian Mbappé.
Es un pacto muy bien planificado. El jugador percibirá una ficha de quince millones de euros netos, la misma que disfrutan Bellingham y Vinicius, para no romper la escala salarial del plantel. Kylian si verá añadidos a su contrato unos bonus que pueden aumentar la cifra hasta los 25.
El mayor ingreso económico de los profesionales son los derechos de imagen. Normalmente los futbolistas y la casa blanca se reparten este negociado al 50 por ciento. Con la estrella será distinto. El Real Madrid se llevará el 30 por ciento de los contratos de publicidad que produzca relacionados con Kylian Mbappé, que cobrará el 70 por ciento. La entente es perfecta. La institución madridista no tiene que pagar por adelantado una cifra enorme a Mbappé. El francés percibirá la mayor proporción de esos derechos una vez se cobren.
Una era casi imposible de emular
Comienza otra era en un club que ha marcado una galaxia estratosférica con la consecución de seis Champions en una década. Es casi irrepetible, imposible igualarlo. Con el Real Madrid no puede decirse eso. Esa es su grandeza. Nada es imposible en esta casa. Mbappé, listo, no piensa en igualarla, sino en continuarla.