'Se acabó', el documental de la selección femenina: los villanos Rubiales y Vilda y ataques entre ellas
El documental de Netflix narra desde el punto de vista de las jugadoras de la España femenina todas las polémicas de los últimos años
Las lágrimas de Jenni Hermoso en el adelanto del documental 'Se acabó': «No saben la historia real»
Había grandes expectativas con el documental de Netflix Se acabó: Diario de las campeonas donde la selección española de fútbol femenino relata no solo el beso de Luis Rubiales a Jenni Hermoso sino que hace un repaso a la Copa del Mundo que ganó España en 2023 y también a los años previos, primero sin Jorge Vilda y después con él como seleccionador, muy cuestionado desde que llegó, tal y como cuentan en el documental.
Realmente la cinta de Netflix, con una duración de hora y media no cuenta demasiado que no se supiera. Se habló durante la presentación de que tendría conversaciones y testimonios inéditos, pero no deja de ser un repaso a los días del mundial y sobre todo a los posteriores, tras el famoso «piquito» de Luis Rubiales a Jenni Hermoso que provocó la caída del presidente de la RFEF, hasta entonces flotando en distintos escándalos.
En Se Acabó: Diario de las campeonas participan 10 futbolistas: Aitana Bonmatí, Alexia Putellas, Irene Paredes, Ivana Andrés, Jenni Hermoso, Laia Codina, Lola Gallardo, Olga Carmona, Sandra Paños y Tere Abelleira. Todas ellas con piezas importantes de la selección, pero no todas son campeonas del mundo. Las guardametas Lola Gallardo y Sandra Paños fueron dos de las que no fueron al Mundial 2023 tras renunciar a España, aunque en el documental se ha conocido que la exportera del Barcelona solicitó volver pero Vilda no la llevó «por su propio ego».
Todas las jugadoras acusan a Jorge Vilda de ser un «enchufado» de Luis Rubiales (que llegó a la presidencia tres años más tarde que Vilda al banquillo) por su amistad con Ángel Vilda, padre del exseleccionador y con toda una carrera en la RFEF. Aseguran que no tenía ni idea de táctica y le culpan, entre otras cosas, de la goleada encajada ante Japón (4-0) en la fase de grupos del Mundial, cuando España ya estaba clasificada para los octavos de final.
También explican los motivos de las 15 que renunciaron a España a un año del Mundial y niegan que exigieran el cese del ya exseleccionador. Ellas, según dicen, pedían cambios en la Federación y tener un trato similar al del fútbol masculino. De hecho, en esa parte aprovechan también para quejarse del trato de Luis Rubiales con Sergio Ramos y Gerard Piqué jugadores a los que mandan varios recados.
Además de Vilda, también hablan del seleccionador anterior, Ignacio Quereda, un hombre que únicamente ha dirigido en su carrera a la España femenina y que estuvo 27 años en el cargo (1988 - 2015). Las jugadoras dejan en mal lugar al técnico madrileño y le acusan de vejaciones y de tratarlas «como si fueran sus sobrinas pequeñas». También le acusan de no saber de fútbol y hacer alineaciones «con 12 jugadoras en la pizarra», algo que confirma Vero Boquete, leyenda de la selección.
Ataques entre ellas
Lo que más sorprende en el documental es que todas reconocen abiertamente que el ambiente no era el mejor. De hecho Putellas, Hermoso y Bonmatí no dudan en cuestionar la capitanía de Ivana Andrés, quien participa en la cinta y tenía una buena relación con Vilda. Bien es cierto que ella, al igual que todas, se sumó al #SeAcabó que terminó dando la vuelta al mundo y llevando a la FIFA a hacer caer a Rubiales.
Sin embargo, en todo momento queda claro que no tienen una gran relación y que fue un momento puntual. Es más, las grades futbolistas de la selección consideran que Ivana Andrés, que ya no va convocada con España, no tenía ni el carácter ni el talento para llevar el brazalete. Otra que también recibe alguna crítica y se muerde la lengua a la hora de hablar es Olga Carmona, quien aprovechó la situación que había en la selección para ganarse un hueco y convertirse en una imprescindible.
El documental hace un repaso de todo lo comentado mientras que Jenni Hermoso está en su casa con Alexia Putellas, ambas esperando a Aitana Bonmatí que llega a última hora. Esto evidencia la gran relación que tienen las tres, pues las demás hablan en una sala una a una, salvo Gallardo y Paños, que desde su casa –donde vieron el Mundial– cuentan como se vivió desde fuera todo el ruido generado.
En definitiva, Se Acabó: El documental de las campeonas cuenta la versión de las futbolistas sobre lo ocurrido en los últimos años, algo que más o menos ya se conocía. Rubiales y Vilda son presentados como villanos y recuerdan las presiones a Hermoso para que no denunciara «el piquito» y quitara hierro al asunto.