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Los jugadores del Real Madrid en la final de la Supercopa de EspañaAFP

Mea culpa general en el Real Madrid: los jugadores fallan, y Ancelotti también

El análisis interno del Real Madrid es profundo, duro, severo. Es un estudio de crisis, porque hay una crisis de realidad cuando las derrotas importantes persisten en el tiempo sin encontrar una solución. Dos fracasos ante el Barcelona, uno ante el Milan y otro frente al Liverpool, marcados con las mismas equivocaciones. El fiasco de San Mamés fue un caso diferente, porque se falló un penalti y se regalaron los dos goles. La preocupación se ha consolidado con las dos decepciones ante el Barcelona, contra el Milan en el Bernabéu y en la visita al Liverpool.

La visión de 360 grados de la dirección deportiva madridista es objetiva y da en la diana del problema: el Real Madrid ya ha ganado dos títulos, está segundo en la Liga y mantiene todas las aspiraciones en la Champions y en la Copa, pero pierde casi todos los partidos con los adversarios de nivel. La dirección deportiva ha abordado el estado del equipo en un diálogo abierto al lado de Ancelotti, con claridad y crudeza.

Ancelotti tiene que poner y dar la cara por todos en el estudio de situación de la entidad y los primeros que reconocen que han fallado son los futbolistas. Los líderes del plantel han hablado con realismo en la cocina blanca de Valdebebas.

Han lavado los trapos sucios de su flojo rendimiento y han admitido ante Ancelotti que no han dado la cara en la faceta creativa, que no han estado certeros en ataque y sobre todo que no han ejecutado un plan defensivo general que es fundamental para vencer en los partidos decisivos. Este capítulo es clave y merece una profundidad de análisis, porque marca negativamente todo lo que ha sucedido.

El grupo no se sacrifica sin balón

El punto más destacado en el balance de los errores es que el Real Madrid no defiende. No ejecuta el sistema destructivo que le llevó a conseguir las dos últimas Copas de Europa. Y Carlo Ancelotti ha dejado claro a los jugadores una verdad que no necesita explicarles porque lo han comprobado en sus éxitos: si no se realiza un sistema general defensivo no se ganan los grandes títulos.

Cuando hablamos de sistema defensivo, muchos lectores interpretan que nos referimos a los cuatro defensores. No es así. El esquema defensivo que triunfa, el que ha llevado al Real Madrid a las victorias inolvidables, lo ejecutan los once futbolistas.

En ese esquema de 'la estrategia sin balón', Mbappé y Vinicius tienen mayor libertad para no cumplir a rajatabla el marcaje a sus rivales directos, porque son precisamente ellos quienes se concentran en intentar anularles, pero los otros ocho hombres de campo de 'Carletto' sí deben cumplir estrictamente la vigilancia a su par. Bellingham es el ejemplo perfecto de esa labor destructiva que han de hacer todos. Pues la cruda realidad es que el campeón de Europa ha sufrido muchos goles porque los pupilos de Carlo no han aplicado con acierto su misión destructora.

Hablemos claro. Para vencer en las finales y en los grandes encuentros es necesario un sacrificio general sin balón que los profesionales del Real Madrid no han hecho, salvo en Bérgamo frente a la Atalanta. No han bajado a defender y no han realizado los movimientos conjuntos para taponar los huecos.

Vinicius lucha por un balón durante la Supercopa de EspañaAFP

El entrenador italiano lleva repitiendo varios meses que si no se hace el sacrificio destructivo sin balón no habrá triunfo. Subraya que desde que llegó en esta segunda etapa sí lo hicieron durante tres años y esa entrega general permitió ganarlo casi todo. Pero ahora sus hombres no ejecutan ese trabajo destructor con eficacia. La pregunta paralela es: ¿No hay suficiente fondo físico para llevarlo a cabo? La respuesta es que hubo partidos en los que pareció faltar fuelle, pero en otros sí se demostró poderío físico hasta el final y también se recibieron goles en contra.

Ancelotti piensa que se han soportado excesivos tantos en contra por falta de concentración en los marcajes y en los movimientos conjuntos para cubrir al compañero. Hay que detallar que el sistema defensivo se mueve como un barco y el vértice de presión alta comienza donde el contrario posee la pelota.

Desde ahí todo el equipo debe morder, vigilar a su par y estar atento por si el rival supera una línea para salir a frenar al enemigo. El Real Madrid no ha hecho bien este trabajo a lo largo de esta temporada y el precio pagado ya lo conocen.

Ancelotti también falla: no cambia

El análisis interno es crudo y no hay paños calientes, porque no está el horno para bollos cuando el Barcelona te hace nueve goles en dos encuentros, el Milán te marca tres y el Rayo otros tres. Ancelotti también ha fallado. Es cierto que el técnico acusa las bajas de larga duración de Carvajal y Militao, que no se cubrieron las despedidas de Nacho y Kroos, pero es cierto también que no ha utilizado bien a los jugadores que tiene.

En el debe de Carlo está el haber sentado a Raúl Asencio cuando ofreció un excelente rendimiento y fue el mejor en varios encuentros. Brilló ante el Osasuna y fue el único destacado del Real Madrid en San Mamés ¿Por qué le quitó de la titularidad? El entrenador italiano guarda escalafones y cuando Tchouaméni recibió el alta pasó directamente a ser titular como central, en detrimento del joven canterano.

Lo que ha hecho mal Carlo es sentar a Raúl Asencio y darle muy pocos minutos desde entonces. Ha cortado su progresión. El tiempo ha demostrado que Tchouaméni no puede ser el central del Real Madrid cuando el adversario es relevante, sea el Barcelona o el Liverpool. Asencio sí es central y tendría que entrar en el once cuando las evidencias son tan claras.

Ancelotti ya fue advertido anteriormente para que contara con el plan B. Reaccionó. Las entradas de Ceballos, Güler y Fran García fueron un acierto. Tiene que continuar por esta vía. Y dar a Raúl Asencio el sitio que se ha ganado. Estos hombres sí están en la plantilla y tiene que darles mayor protagonismo cuando los titulares no funcionan al nivel esperado. Si después también se pierde, nunca podrán decirle a Carlo que no lo intentó con todos. Debe sacar el mayor rendimiento a lo que tiene en la plantilla.

Sí, Ancelotti, se comprende que falta media defensa titular del año pasado, Carvajal, Militao y Nacho, pero tiene la revelación de Asencio, que apareció por necesidad ante la carencia de defensas. Lorenzo Aguado y Diego Aguado esperan igualmente su oportunidad. Debe arriesgar. Hay que probar otros mimbres si la cosa no funciona.