Xavi se enfrenta al más difícil todavía en Champions
El Barcelona necesita seguir vivo en Europa no sólo por un objetivo deportivo si no por una obligación económica por su complicada situación financiera
El calendario no se detiene y el Barcelona tiene una auténtica 'final' ante el Benfica en la Liga de Campeones. Los de Xavi Hernández se juegan su futuro en la máxima competición europea contra el equipo lisboeta, ya que los culés están segundos (6 puntos) con dos puntos de ventaja sobre los portugueses, terceros (4 puntos). Una victoria ante los portugueses aseguraría la clasificación del Barça para los octavos de final, pero todo lo que no sea ganar y sumar los tres puntos complicaría la continuidad de los azulgrana en el máximo torneo continental.
El primer partido de la 'era Xavi' en LaLiga trajo la mejor entrada de la temporada (excepción hecha del Clásico) y los aficionados vuelven a ilusionarse con los brotes verdes vistos en el derbi contra el Espanyol en el Camp Nou, y aunque se vieron cosas ilusionantes, y mucho canterano, el equipo blaugrana acabó pidiendo la hora.
El Barcelona de Xavi es el único equipo de la Liga Santander al que no le han pitado ningún penalti en contra y se encuentra ante su segundo (o tercer) partido a vida o muerte en lo que va de curso. Seguir vivo en Champions no es solo un objetivo deportivo, sino una necesidad económica en una temporada de números rojos. Lo que ya sabe el entrenador egarense es que no cuenta con los canteranos Ilias Akhomach (sancionado) y Ez Abde (no inscrito), aparte de la baja de Ansu Fati (lesionado).
Situación límite
No se recuerda en Barcelona una situación igual porque el partido se ha convertido en poco menos que un cara o cruz: si ganan pasan a Octavos pero, si empatan o pierden, irían a Múnich a jugarse el pase contra un Bayern que no ha cedido ningún punto.
Las buenas noticas para Xavi son que el equipo intenta asumir los postulados de la era Guardiola, que en la víspera se cumplió el aniversario del peor día de su vida deportiva. El técnico se identifica con las ideas de su exentrenador, por eso quiere la pelota y orden y en el derbi la posesión llegó al 65 %, fue fiel al 4-4-3, su equipo chutó a puerta once veces durante los primeros 45 minutos (aunque sin mucho acierto o peligro) y se intentó buscar la presión alta mientras aguantó el físico.
Xavi inquiere siempre extremos abiertos, pegados a la banda, algo que no se ve tanto en la actualidad, porque quiere que su equipo se arriesgue y se atreva a buscar la superioridad numérica en esa parte del campo o se desborde por velocidad.
Hasta aquí las cosas buenas, aparte del optimismo que trae la ilusión de un proyecto nuevo y que haya ganado el Golden Boy el lesionado Pedri. En las negativas, aparte de las ya sabidas por las bajas, es la presión por caer en la fase de grupos más el duro golpe económico que se llevaría el club.
Xavi piensa en positivo
«Lo veo como un reto. Para qué pensar en un escenario negativo cuando se puede pensar en un escenario positivo. El Barça no está en un momento para sacar pecho, pero tenemos que ser positivos y valientes e ir al ataque. Si ganamos estamos en octavos», añadió Xavi sobre un encuentro a cara o cruz para el conjunto azulgrana de cara a pasar de ronda.
Robo a Ansu Fati durante el derbi
Los ladrones desvalijaron el piso superior de la vivienda, donde supuestamente se llevaron dinero, joyas y relojes pese a que en la planta baja se encontraban algunos familiares del futbolista viendo el partido por televisión.