Lobtuf, fútbol al revés

El Madrid ganó su octavo partido consecutivo en suelo italiano dice la estadística. Conviene matizar. Esta vez ganó un partido de lobtuf, fútbol al revés. Ha ganado pues siete de fútbol y uno de esto otro.

Se están cargando el fútbol de siempre. Bueno, ya no lo es. Y no tanto los árbitros como los incalificables personajes que les obligan a pitar penalti en la acción de Nacho y, ya puestos, la de Pedrosa una vez se sale de Italia a la izquierda. Son víctimas los del pito de ese afán inaudito de tocarlo y complicarlo todo que tiene el mando.

Es una broma, una chufla, un horror. Los que mandan deben odiar el fútbol, van por él. Otra cosa no se explica. No, no es fútbol. O es eso, fútbol al revés. Se extrañan por ahí que haya gente huyendo de este espectáculo. Gente cansada de que le tomen el pelo. Personal que se conforma con ver los resúmenes harta de esta locura. Lo paran o habrá más. He dicho.

El partido fue europeo. Dos equipos a por uvas mezclando errores, el 1-0, la pérdida napolitana en el 1-2, y aciertos. Estuvo la decisión en el aire hasta el final porque siendo mejor, que lo es, el Madrid no lo cerró. Acierta Valverde cuando dice que pueden y deben jugar mejor.

El gili penalti del empate le desorientó. Y envalentonó al rival. El Madrid poderoso y dominador del primer acto pasó apuros. Ganó. Seguramente porque es mejor que este Nápoles libra a libra. Ahora, ganando los dos partidos que le enfrentarán con el Braga estará clasificado.

Alfredito Bellingham volvió a hacer de las suyas. Dio un gol, marcó otro y fue el pequeño imponente Di Stefano en todas las zonas del campo. Jude continúa su alfredización. Subido a él, el equipo cabalga.

Camavinga volvió a ser lateral. Vinicius se reencontró con el gol. Y Valverde para el definitivo. Rodrygo sigue espesísimo. Kepa duda y se rehace. Rüdiger defiende bien. Y Nacho, al que le cayeron tres partidos de sanción aquí.

Mucho Carvajal. Bien Tchouaméni y Kroos lo que jugó… El añorado Modric le dio sentido al equipo cuando pintaban bastos. Lo mejor, como supo rehacerse del gol regalado y voltear otra vez el marcador. Va a batir este Madrid todos sus registros en materia de remontadas.

Era importante ganar y consiguió una gran victoria. De nuevo en la Italia ‘bianca’. Y radiante , como aquella novia. Los madridistas que pagarían porque dejara la Liga y se apuntara a otra lo tendrán claro: en la vieja Italia no tiene rival. Juegue al fútbol o al lobtuf. Me ponen muy nervioso…