El Real Madrid echa al fin el candado en Liga
A la octava fue la vencida y no encajó un gol por primera vez en lo que va de campeonato
Al gran arranque liguero del Real Madrid le faltaba una cosa. El club blanco no ha perdido aún en Liga –tampoco en Champions– y solo cedió el empate de hace una semana ante Osasuna. Ha firmado ya el mejor arranque de temporada de sus 120 años, igualando con la primera temporada de la Liga, allá por 1928: 11 victorias y 1 empate. El equipo de Ancelotti está perfectamente engrasado y marcha a buen ritmo, manteniendo el ritmo al Barcelona a tan solo una semana de el Clásico en el Santiago Bernabéu.
Si bien en los dos últimos encuentros, ante Shakhtar y Getafe, ha dado una sensación de que algo falla ante el gol, ya que el Real Madrid dejó abierto estos duelos -ganó por la mínima ambos- cuando fue claramente superior, la gran noticia del partido en el Coliseum fue dejar al fin la portería a cero. Ha costado, pero a la octava fue la vencida. Con Lunin en la portería (el ucraniano lleva tres partidos consecutivos y puede que haya un cuarto... y un quinto, que sería el Clásico) el Madrid terminó un partido sin encajar gol. Es toda una novedad.
En los siete encuentros anteriores de LaLiga, seis jugados por Courtois y uno por Lunin, al Real Madrid le habían metido gol sus siete rivales. Había ganado todos los partidos –excepto el empate ante Osasuna– pero Ancelotti tenía un importante problema atrás, donde siempre le marcaban. Le metió el Almería, el Celta de Vigo, el Espanyol, el Betis, el Mallorca, el Atlético de Madrid y Osasuna. Todos le marcaron tan solo un gol, el equipo navarro fue el único que hizo bueno ese tanto, pero el Real Madrid tenía ahí un problema. En Getafe al fin puso el candado y Ancelotti se fue encantado con ese asunto, no eso sí con la innecesaria puerta abierta que le puso su equipo al duelo.
«La portería a cero es muy importante. El éxito del año pasado se debió al aspecto defensivo muy bueno», recordó el técnico tras este encuentro. La casualidad quiso que el Real Madrid dejara la portería a cero a la octava oportunidad en Liga –en Champions sí dejó de encajar en dos de los tres encuentros– el mismo día en el que al fin Lunin también se fue a vestuarios sin recibir gol en su octavo partido con el Real Madrid.
Esta racha negativa en la parte de los goles en contra, que no se ha notado apenas en los resultados, no se veía desde septiembre de 2019, cuando también estuvo siete jornadas de Liga encajando al menos un tanto. Pese a ser colíder de LaLiga –con los mismos puntos que el Barcelona– el Athletic Club y el Real Betis han encajado menos goles que el Real Madrid (cinco), mientras que el Atlético también ha recibido esos siete tantos que los blancos. El Barcelona lidera la tabla en este sentido y con diferencia: Ter Stegen solo ha encajado un gol.
Para ganar LaLiga se necesita una consistencia en la defensa y el propio Real Madrid de la pasada temporada fue el mayor ejemplo, con tan solo 31 goles encajados y una gran relación entre los tantos anotados y los recibidos (+49). Al menos con lo visto en Getafe Ancelotti tapona de esta forma la sangría goleadora en contra justo antes del Clásico que se jugará al final de esta semana, el próximo domingo 16 de octubre. Ahí se verán cara a cara los dos equipos más goleadores de LaLiga, pero ambos con problemas en defensas más allá de lo que expresan los datos.