Tras finalizar el partido, Piqué fue manteado por sus compañeros en su adiós
Manteo y lágrimas en el adiós de Piqué: «A veces querer es dejar marchar»
El jugador se despide del FC Barcelona con el homenaje del Camp Nou: camisetas especiales, hijos en el estadio, ovación y vuelta de honor. «Tras una relación de tanto amor y pasión era el momento de darnos un espacio», ha dicho
Ha sido la última noche de Gerard Piqué en el Camp Nou. Más de 14 años después de su primera, allá por agosto de 2008, uno de los jugadores más mediáticos de todo el siglo, emblema del FC Barcelona, ha dicho adiós a la que ha sido su casa, aquella en la que se hizo leyenda.
Piqué ha jugado este sábado su último encuentro en el Camp Nou. Aún le faltará un partido más, pero ese será en Pamplona. Ante el Almería se ha despedido de su estadio en una noche emocionante en la que la entidad se volcó con el quinto futbolista que más veces ha vestido la camiseta azulgrana.
Lo que eran hace una semana pitos -culpándole especialmente de la eliminación de la Champions- han sido aplausos este sábado. Cada vez que tocaba el balón la ovación del Camp Nou ha sido muy grande. Los gritos de «Piqué, Piqué» fueron continuos. Antes, en los minutos previos al encuentro, se desplegó en el centro del césped una lona con la palabra 'Sempr3', haciendo un juego de palabras con el dorsal '3' de Piqué, el número que siempre ha llevado como azulgrana.
Tras ello, todos los jugadores del FC Barcelona saltaron al campo con la camiseta de Piqué y su número. Se la quitaron, lógicamente, para empezar el encuentro. En el túnel de vestuarios acompañaron a Gerard sus hijos Milan y Sasha, que hablaron con algunos futbolistas y estuvieron en el banquillo durante el calentamiento además de formar parte de la fotografía con el equipo.
Gerard Piqué se despidió del Camp Nou con la presencia de sus dos hijos
Todos se abrazaban al que este sábado era capitán, ya que Busquets le dio el brazalete para que así lo ejerciera en su último partido en Barcelona. Brazalete, por otra parte, que hay que recordar que en el propio vestuario siempre le negó a Piqué, que nunca ha llegado a estar entre los dos capitanes a pesar de su antigüedad.
En un encuentro tranquilo, en el que no ha tenido prácticamente exigencia, Gerard Piqué fue cambiado en el minuto 83. Y ahí sí que vivió el catalán momentos inolvidables. El encuentro se paró dos minutos para que uno a uno de sus compañeros le abrazaran. En el palco se levantaron. El árbitro permitió el homenaje y al final Piqué acabó con los ojos llorosos, muy emocionado.
Gerard Piqué pone a fin a 14 temporadas (y media) en el FC Barcelona
Una vez que se acabó el encuentro Gerard fue manteado en el centro del campo y dio una vuelta de honor por todo el estadio. Nadie se movió del Camp Nou. Xavi, alejado, le miraba y le aplaudía. El club le puso además un vídeo a través de los videomarcadores en el que repasó sus mejores momentos.
Con todo ello, Piqué acabó cogiendo el micro para dar las gracias a todos los trabajadores e integrantes del club. «En la vida te das cuenta cuando te haces mayor a veces querer es dejarte ir», dijo Gerard, frase que tuvo que cortar al ya romper a llorar.
Tras una relación de tanto amor y pasión creo que era el momento de darnos un espacio, de darnos un poco de aire
«Estoy convencido de que dentro de un futuro estaré aquí. Tras una relación de tanto amor y pasión creo que era el momento de darnos un espacio, de darnos un poco de aire», siguió el jugador en su despedida. «Nací del Barça y moriré del Barça», concluyó antes de que sus compañeros le hicieran un pasillo.