Frenkie de Jong, la brújula que orienta a Xavi en tiempos de mediocridad

La temporada del Barça está dejando más sombras que luces. Eso es algo que cualquier aficionado al fútbol –barcelonista o no– podrá comprobar si ve un partido del conjunto azulgrana. Y son muy pocos los futbolistas que se están salvando de la quema. Lewandowski ni está ni se le espera, Araujo es un flan en defensa, Balde ya no es ese lateral profundo que ilusionó al Barça la temporada pasada y Ferran Torres no es el tiburón del que tanto presume en redes sociales.

El único gran futbolista que está consiguiendo salvarse de la quema es uno que sabe lo que es el buen fútbol. Su nombre es Frenkie De Jong (Gorcum, Países Bajos; 1997) y la labor que está haciendo el futbolista neerlandés en la sala de máquinas del club culé se puede asemejar a un objeto que cualquier persona ha utilizado alguna vez en su vida. Sobre todo cuando está perdido. Y ese utensilio es la brújula.

Es decir, Frenkie De Jong está orientando al Barça de Xavi en tiempos de mediocridad. El club catalán no tiene un rumbo fijo y qué mejor que el neerlandés para tratar de redirigir el rumbo cuando las cosas van mal dadas. Y en su cuarta temporada como futbolista del Barça, De Jong por fin se ha adaptado a los automatismos que rige el fútbol español.

Sus estadísticas no son nada del otro mundo. En lo que va de temporada, el centrocampista neerlandés tan sólo ha sido capaz de marcar un gol y no ha dado ni una sola asistencia, pero es el único futbolista capaz de poner algo de pausa en el centro del campo del Barça. De Jong ha dado un paso adelante.

¿Por qué este año De Jong está tan inspirado? Esta es una pregunta con fácil respuesta. La temporada pasada, el Barça contaba con la inestimable labor de Sergio Busquets, uno de los mejores pivotes defensivos de la historia del Barça y el único futbolista de campo capaz de calmar a su equipo con resultados adversos. Busquets lo salvaba todo. Y ahora que el futbolista de Sabadell no está en el Barça, le ha tocado cubrir esa vacante a De Jong.

El neerlandés aprendió mucho al lado de Busquets. No es un pivote como tal, pero sí tiene la capacidad de adaptarse a ese rol. Y ese aprendizaje le está sirviendo para ser el líder de la sala de máquinas y para guiar a jugadores como Ilkay Gündogan (que sigue sin adaptarse al fútbol español), Pedri, Oriol Romeu, Fermín López o, incluso, Sergi Roberto.

200 partidos oficiales con el Barça

Como se ha comentado anteriormente, a pesar de tener tan solo 26 años, De Jong ya es un 'veterano' en el Barça. El ex del Ajax aterrizó en la capital catalana en el verano de 2019 y ya ha alcanzado la friolera de 200 partidos como jugador azulgrana, una cifra que demuestra que De Jong es el futuro del Barça en el centro del campo.

Todos los balones pasan por sus botas y, en momentos en los que el Barça está espeso, es el único futbolista capaz de desbloquear las líneas de presión y abrir huecos para sus compañeros. Sin embargo, este liderazgo no se está traduciendo en títulos. Cabe recordar que el Barça perdió el primer título de la temporada en Arabia Saudí – donde el Madrid le pasó por encima – y a eso hay que sumarle que las cosas en Liga no van tan bien como hubieran deseado en Barcelona.

Aun así, De Jong está convencido de que el Barça tiene plantilla de sobra para pelear por los tres títulos que le quedan en juego: Liga, Copa y Champions. En Liga están a siete puntos de los líderes, pero no tiene pinta de que el Barça vaya a revalidar el título de campeón. En Copa han llegado a cuartos después de eliminar al Barbastro (2ª RFEF) y a Unionistas (1ª RFEF), pero en la antepenúltima cayó ante el Athletic en San Mamés. (4-2). Y en la Copa de Europa deberían ganar bien al Nápoles, pero viendo lo mucho que sufrieron en fase de grupos... no deben de dar nada por sentado.

«Tenemos que mejorar, lo sabemos. La calidad está, el juego no está mal, pero falta contundencia, concentración. Tenemos que mejorar eso, estar concentrados todo el partido. Si hacemos todo eso tenemos una muy buena plantilla para pelear por todo. Quizás hemos generado más ocasiones que el año pasado, pero es verdad que en defensa, como equipo, a veces no estamos concentrados los 90 minutos. No puedes regalar nada al contrario», comentó De Jong recientemente.