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El Real Madrid se reencontró con la victoria en el BernabéuEFE

Real Madrid 4-0 CA Osasuna

El Real Madrid vuelve a sonreír y deja atrás el gabinete de crisis con una gloriosa goleada

Para salir de una crisis de resultados, no hay mejor receta que una buena goleada. Es una regla esencial del fútbol, básica, elemental. Y eso es lo que ha hecho el Real Madrid este sábado. El conjunto blanco regresó a la senda de la victoria ante Osasuna gracias a un hat-trick de Vinicius y otro gol de Bellingham (4-0).

Después de dos derrotas consecutivas y de declarar el estado de alarma, el fútbol le concedió una nueva oportunidad al Real Madrid para poder dejar atrás el gabinete de crisis y resarcirse ante su gente. Y en esta ocasión, el rival era CA Osasuna, un equipo que venía haciendo las cosas francamente bien y que visitaba el coliseo blanco como quinto clasificado.

El objetivo del Real Madrid era claro: salir dominando para meterle el miedo en el cuerpo a Osasuna. Y para tratar de marcar el primer gol de la contienda lo antes posible, el madridismo empezó a hacer su trabajo y el equipo lo notó. Pero a la hora de la verdad, el equipo de Ancelotti no terminaba de encontrar el premio del gol. Había que seguir intentándolo porque Sergio Herrera estaba deteniendo todo con relativa facilidad.

En el minuto 19 de partido llegó la primera mala noticia del duelo para el Real Madrid. Rodrygo, que regresaba a la titularidad, se rompió y tuvo que ser sustituido por Brahim. El brasileño se retiró cojeando y con cara de circunstancias. No tenía buena pinta el asunto y el '11' sabía que su vuelta al once había sido demasiado arriesgada.

Y por si lo de Rodrygo había sido poco, el siguiente en caer en combate fue Eder Militao diez minutos después. El central brasileño fue a rematar un balón y se le clavó la rodilla en el suelo. Era tal la gravedad del asunto que se tuvo que retirar en camilla llorando desconsolado. Pintaba a cruzado (otra vez). Turno para Raúl Asencio, canterano madridista, que se llevó una gran ovación por parte del respetable.

Brahim conduce un balón ante Jon MoncayolaEFE

Al Madrid le estaban creciendo los enanos. Las dos lesiones cayeron como un jarro de agua fría. Sin embargo, la reacción blanca llegó en forma de gol. Bellingham abrió al espacio, Vinicius recortó ante Catena y engañó a Sergio Herrera para introducir el balón por el palo corto de la portería del meta rojillo. La cosa empezaba a mejorar. Tampoco era muy difícil.

El gol de Vinicius volvió a activar al Madrid y empezó a dar la sensación de que podía caer el segundo en cualquier momento. Y el encargado de poner el 2-0 antes del descanso fue Jude Bellingham. El inglés aprovechó un pase de crack de Raúl Asencio y sin alterarse lo más mínimo la picó por encima de Sergio Herrera. El Bernabéu (por fin) pudo cantar el primer Hey Jude de la temporada. En apenas 10 minutos, el Madrid pasó de la tristeza por las lesiones a la alegría por los dos goles antes del intermedio.

El Madrid se desata

La segunda mitad arrancó con un nuevo cambio por lesión en el Real Madrid. Lucas Vázquez había sufrido un golpe en los minutos finales del primer acto y Ancelotti le sustituyó por Modric. ¿Qué quería decir eso? Valverde pasaba a ser lateral derecho y el croata ocupaba el puesto del uruguayo.

Con 2-0 en el marcador, el Madrid salió dominando con balón pero sin demasiadas prisas por ampliar el marcador. La ventaja era suya y el triunfo dependía de ellos, de nadie más. El que tenía más urgencias era el conjunto navarro, que cuando recuperaba el balón buscaba la profundidad por medio de Abel Bretones y Jesús Areso, los dos laterales.

Vinicius celebra uno de sus tres goles ante OsasunaAFP

En clave madridista, Mbappé, Camavinga y compañía se empezaron a activar y levantaron el aplauso del Bernabéu. Se notaba que lo de este sábado era otra cosa. Había menos crispación en el ambiente y hasta hubo tiempo para que el Fondo Sur del estadio madridista le dedicara un cántico al astro francés.

Poco después de eso llegó el 3-0 que volvió a ser obra de Vinicius. El brasileño metió el turbo, aprovechó su velocidad arrolladora, se plantó solo ante Herrera, le regateó y definió con calidad y maestría. El gol fue idéntico al que le metió la temporada pasada al cuadro navarro en este mismo escenario.

Osasuna ya había bajado los brazos de forma definitiva y el Madrid aprovechó para seguir haciendo sangre. Vinicius estaba absolutamente desatado, marcó el 4-0 y su particular hat-trick. La fiesta en el Bernabéu era total. Unos minutos más tarde llegó el momento de los cambios. Ancelotti dio minutos a Endrick y a Arda Güler y el público les recibió a lo grande. Siempre apetece ver a dos talentos como el brasileño y el turco.

Si con 2-0 el partido estaba cerrado, con 4-0 todavía más. El ritmo del encuentro decayó. Aun así, al Bernabéu le faltaba el gol de Mbappé que no terminaba de llegar. Pero conociendo al astro francés, seguro que le importaba más volver a ganar que marcar. El partido estaba visto para sentencia. Victoria vital para el Real Madrid con una goleada gloriosa.

Ficha técnica

4- Real Madrid: Lunin; Lucas Vázquez (Modric, 46'), Militao (Raúl Asencio, 30'), Rüdiger, Fran García; Valverde, Camavinga, Bellingham (Arda Güler, 75'); Rodrygo (Brahim, 20'), Mbappé y Vinicius (Endrick, 75').

​0- CA Osasuna: Sergio Herrera; Areso, Catena, Boyomo, Abel Bretones; Moncayola, Lucas Torró, Aimar Oroz (Rubén García, 71') ; Rubén Peña (Raúl García, 59'), Budimir (Moi Gómez, 71'), Bryan Zaragoza.

​Goles: 1-0 Vinicius (34'); 2-0 Bellingham (42'); 3-0 Vinicius (61'); 4-0 Vinicius (69')

​Árbitro: Melero López (comité andaluz). Amonestó a los visitantes Catena (55'), Torró (88')

​Incidencias: Partido correspondiente a la jornada 13 de LaLiga EA Sports disputado en el estadio Santiago Bernabéu ante 72.462 espectadores.