Atlético de Madrid - Alavés, en directo: la Liga en vivo
Los del Cholo Simeone reciben a los vitorianos en el Metropolitano con el objetivo de sumar una nueva victoria en casa y mantener la tercera posición liguera
Reencontrado con su esencia defensiva, relanzado por el momento de Jan Oblak y la contundencia en ataque y reconfortado por cuatro victorias consecutivas, el Atlético de Madrid expone su cambio a la revisión del Metropolitano y del Alavés, el adversario al que recibe este sábado y al que ha ganado en todos los duelos, seis, en ese estadio, escenario del partido número 700 de Diego Simeone al frente del equipo.
Como cuando debutó, el 7 de enero de 2012, y como cuando dio el gran salto de nuevo hacia la elite, con ocho títulos, el equipo ha vuelto a sus trazos originales. Ha mirado a su pasado para impulsarse en el presente, cuando los resultados incidían en las dudas en torno al conjunto madrileño y el entrenador y cuando el Betis, hace apenas cinco partidos, lo zarandeó de manera grotesca para desatar la alerta definitiva en el técnico argentino.
Simeone optó por el refugio defensivo. Garantía de éxito al principio de todo y más allá, no es nada nuevo en el Atlético. Cuando los marcadores no acompañan, la reacción ha ido hacia atrás, a la prioridad defensiva sobre la que construyó, hace ya más de una década, la época más ganadora del club. Este sábado, la era Simeone cumplirá 700 partidos oficiales, ahora con una inversión muy superior, unas expectativas mucho más altas y un recorrido hasta ahí prácticamente incuestionable, pero con la misma esencia con la que inició la aventura de su vida como entrenador a finales de 2011. Otros tiempos, otra exigencia.
Entre los fichajes de Julián Álvarez, Alexander Sorloth, Conor Gallagher o Robin Le Normand, principalmente, la idea era otra al inicio del curso, pero, por el mandato de los resultados, lo único certero en el fútbol, ha virado hacia la fórmula más eficaz desde el primer duelo en adelante para el Atlético de Simeone: la prioridad defensiva, el momento imponente del portero Jan Oblak y la pegada en ataque, crucial tanto en París como en Mallorca.
Cuatro tiros, tres goles y dos victorias que han revitalizado al Atlético, que superó una situación límite en la Liga de Campeones con el triunfo a última hora en París, sostenido por un prodigioso Oblak, y lo confirmó con el 0-1 en Palma gracias a la solvencia en su portería y la efectividad para reponerse a siete puntos del liderato que maneja el Barcelona.
Los resultados respaldan el giro defensivo, al que, por el momento, le falta juego y, sobre todo, ocasiones; ya sea al contragolpe -también proclamada como una de las señas de identidad de este equipo en su reencuentro con el pasado-, como ganó en Mallorca y en París, o a través de la responsabilidad de la posesión del balón, cuando debe ser quien proponga, como se supone que le tocará este sábado cuando reciba al Alavés.
Es una prueba de fuego en ese sentido para este ‘cambio’ del Atlético, que recupera a Marcos Llorente, ya restablecido de la rotura muscular que lo ha apartado de los últimos ocho encuentros oficiales y directo al once en el carril derecho, en el que es baja Nahuel Molina, lesionado con su selección.
Además, aún no están disponibles ni Le Normand, que se perderá su décimo encuentro por el traumatismo craneoencefálico con hematoma subdural sufrido en el derbi contra el Real Madrid, ni Thomas Lemar para completar las tres ausencias que tiene Simeone para armar su once titular, condicionado por la carga de minutos y viajes de algunos de sus internacionales y la proximidad, el martes que viene, de la visita de Champions a Praga.
Eso se traducirá, previsiblemente, en el descanso de inicio de José María Giménez y quizá de Julián Álvarez. Pablo Barrios y Jan Oblak serían los únicos internacionales en el once titular, en el que Antoine Griezmann y Ángel Correa, si finalmente Julián Álvarez descansa al principio, formarían el ataque, según las pruebas del técnico durante esta semana.
De nuevo apunta a reserva Sorloth, por cuarto choque seguido y por quinto en los últimos seis. En ese tramo, solo salió desde el principio en la Copa del Rey contra el Vic.
En el medio campo, aparte de Barrios, jugará Koke Resurrección y probablemente Samuel Lino, a la espera de reencontrarse el brasileño con la versión que ofreció el pasado curso, con Rodrigo de Paul o Conor Gallagher como alternativas. En defensa se mantendrá Javi Galan como carrilero zurdo, con Clement Lenglet, Axel Witsel y César Azpilicueta como centrales, según las pruebas de Simeone, si finalmente rota a Giménez en el once.
Enfrente, el Alavés regresa a la competición con la intención de mantenerse por encima de los puestos de descenso de los que les separan tres puntos y tras un parón en el que ha podido contar con casi todos sus efectivos.
Únicamente Jesús Owono y Abdel Abqar viajaron con sus selecciones, por lo que Luis García Plaza ha podido preparar un partido tan importante y tan complicado a la vez.
La asignatura pendiente de los babazorros está lejos de su feudo, donde solo han ganado un partido, ante la Real Sociedad, pero ha perdido todos los demás.
Para este encuentro, el técnico alavesista no podrá contar con Carlos Protesoni ni Hugo Novoa, ambos lesionados, y todo apunta a que formará con un once que recuerde más al Alavés del curso pasado.
Las dudas podían estar en el centro de la defensa, en la que Abdel Abqar no tiene un compañero muy definido. De hecho, el Alavés podría formar con cinco defensas para protegerse de la velocidad del plantel rojiblanco.
En ese caso podrían formar Abdel Abqar, Aleksandar Sedlar y Moussa Diarra, con Nahuel Tenaglia y Manu Sánchez en los carriles. En el centro del campo podría actuar Antonio Blanco, Jon Guridi y Ander Guevara, con Carlos Vicente y Kike García como hombres más ofensivos.