«Es una roja»: así decidió el VAR la primera expulsión de Mbappé con el Real Madrid

Kylian Mbappé vio en el duelo entre Deportivo Alavés y Real Madrid la cuarta cartulina roja de su carrera y la primera con el equipo blanco. En una jugada que no iba a ningún lado, con la pelota en el centro del campo, el delantero francés se pasó de revoluciones y le clavó los tacos a Antonio Blanco en el gemelo. Fue una entrada con exceso de fuerza pero que, afortunadamente, no acabó en lesión para el centrocampista babazorro.

Llamó la atención que de primeras César Soto Grado, árbitro del encuentro y que sustituyó a Juan Martínez Munuera -el designado inicialmente pero que acaba de ser padre-, no sacara la cartulina roja. El colegiado riojano tenía una buena posición para ver la acción, pero pitó falta y únicamente tarjeta amarilla. Supo Mbappé desde el principio que no se iba a quedar solo en amarilla y también Lucas Vázquez. «Te va a expulsar tío», le comentó el de Curtis a su compañero.

«César, César. Te recomiendo ir a ver el monitor por una potencial expulsión», le comentó Gil Manzano al árbitro de campo. Así pues, se marchó, por segunda vez en el partido, Soto Grado a la pantalla para ver repetida la entrada de Mbappé. Primero se la mostraron en parado y luego se la soltaron para que viese la secuencia completa. «Suéltamela. El impacto es alto», comenzó diciendo Soto Grado.

Vista la acción, en la que apenas pidió tiros de cámara, el riojano lo tuvo claro y fue con roja directa. «Va con intensidad, hay torsión. Es una roja. Le quito la amarilla y le saco roja a Kylian Mbappé», concluyó el colegiado sin necesitar demasiado tiempo para decidirse. De hecho, en un visto y no visto el delantero galo estaba en el túnel de vestuarios, pues estaba esperando pegado a la pantalla consciente de que no iba a librarse de la expulsión.

Cabe destacar que Mbappé pidió perdón en el vestuario visitante de Mendizorroza a sus compañeros del Real Madrid, visiblemente afectado tras sufrir su primera expulsión en el fútbol español por una dura entrada a Antonio Blanco, con quien también se disculpó tras el partido.

Ahora, el galo espera los partidos de sanción que puede recibir por una acción considerada como juego violento. El colegiado del encuentro, César Soto Grado, reflejó el siguiente motivo en el acta: «Entrar con el pie en forma de plancha a la altura de la espinilla de un contrario, en la disputa de un balón, usando fuerza excesiva».

De esta manera, todo apunta a que el castigo irá de uno a dos partidos, por lo que no peligra la presencia del jugador de Bondy en la final de Copa del Rey que se disputará el próximo 26 de abril en La Cartuja. Lo que es seguro es que no estará ante el Athletic el próximo domingo y habrá que ver si reaparece frente al Getafe en la jornada intersemanal o directamente en la final de Copa. Un clásico que parará el planeta fútbol.