Los argentinos celebran uno de los goles ante PoloniaAFP

Polonia 0-2 Argentina

Argentina cumple y Polonia se clasifica para octavos de forma rácana y gracias a Arabia Saudí

Los polacos empatan con México y les salva el gol postrero de Arabia Saudí ante los aztecas

Argentina ya está en octavos de final. Cumplió los pronósticos y calmó los nervios que surgieron en el país tras su penoso debut en Qatar. No le hizo falta ni tirar de Messi para vencer a Polonia, que se limitó a defender y a pedirle a los argentinos que no metieran más cuando iban 0-2. El resultado les valía a los dos.

Messi salvó el primer match ball o, lo que es lo mismo, Argentina salvó el primer match ball, pero el drama iba a ser el mismo –incluso peor– si la Albiceleste caía ante Polonia y se despedía del Mundial. Hay pocas cosas que en Argentina se respeten más que una Copa del Mundo: si la ganas eres un héroe y si te quedas en primera fase mejor que vuelvas al país. Si lo haces, disfrázate para cruzar la frontera.

Solo había una diferencia entre la Argentina que fue humillada por Arabia Saudí y la Argentina que jugaba con México: una fue anterior al gol de Messi a México y la otra posterior. El trallazo del 10 en el segundo partido fue como un bálsamo para sus compañeros, para su selección y para su país. Como el que respira después de un amago de infarto que queda en nada.

Y con esa tranquilidad afrontó Argentina su partido con Polonia. Las piernas no temblaban como en el inicio con México, el miedo había quedado atrás y las jugadas salían solas. No hacía falta ni que Messi apareciera para crear peligro porque el resto del equipo parecían, por una vez, algo más que los amigos feos del 10. Hasta Rodrigo de Paul parecía un jugador de fútbol.

Di María y Enzo Fernández hacían lo que querían con la zaga polaca. Argentina creía peligro por los dos costados y el gol sobrevolaba la portería de Szczesny, aunque el que voló fue el cancerbero hasta chocar con Messi. Cualquier árbitro habría visto una acción normal como las 300 que hay en un partido, pero el del VAR vio penalti. En un Mundial hay cuotas inclusivas y pasan estas cosas. Messi no dudó, pero tampoco lo hizo Szczesny, que le paró al astro argentino otro penalti. Tres intentos y dos fallos para el 10 en los Mundiales.

Ni siquiera la parada animó a Polonia, que estaba comprando muchas papeletas para quedarse fuera. Seguía líder de grupo, pero si perdía y México vencía por 3 goles eran los aztecas los que pasaban a octavos. Lo mismo a la inversa: si los del Tata Martino ganaban y la Albiceleste les colaba tres, cosa no tan complicada para su juego.

Poco tardó Argentina en adelantarse tras el descanso. 52 segundos. Nahuel Molina se asociaba con Di María por la derecha y el del Atlético metió el balón al área, donde esperaba Alexis Mac Allister para batir con la diestra a Szczesny. Le dio mordida, pero si le hubiera dado bien el balón habría ido al muñeco. Le dio tan mal que se fue pegado al palo, imposible para el portero. Si alguien todavía tenía nervios en Argentina, se acababan de ir.

No contentos con el 0-1, la Albiceleste seguía volcada, porque un teórico gol de Polonia le hacía ser segunda de grupo y enfrentarse a Francia. Buscaba la tranquilidad y la encontró en las botas de Julián Álvarez. Un balón entre líneas de Enzo Fernández buscando al del City para que controlara y con la derecha hiciera el 0-2.

Se acabó lo que se daba. Polonia seguía defendiéndose mientras llegaban noticias del 2-0 de México a Arabia Saudí. Con esos resultados, los polacos se clasificaban en el desempate por tener menos tarjetas que los aztecas, así que no hacían ni faltas. Argentina se limitaba a tocar, sin buscar demasiado la portería de Szczesny mientras los polacos rezaban para que llegara el final. Solo por la actitud merecían marcharse del Mundial, pero Arabia Saudí les dio tranquilidad con su gol en el descuento ante México. En octavos, ante Francia, no les valdrá ser tan rácanos si quieren seguir en Qatar.