Aficionados franceses celebran la victoria de Francia ante la selección de Marruecos en el Mundial de fútbol de QatarAFP

Francia-Marruecos

Un menor muerto y 170 detenciones: la resaca de la semifinal de Qatar en Francia

Era un partido de alto riesgo y los peores augurios se han cumplido en Francia tras el encuentro que enfrentaba en el Mundial de Qatar al combinado nacional galo y a la selección de Marruecos: un menor de 14 años ha muerto en una noche en la que se han producido unas 170 detenciones.

Más de 2.000 efectivos policiales se habían desplegado en los Campos Elíseos y sus alrededores, en París, ante la previsión de una alta afluencia de aficionados de uno u otro equipo. En total, 10.000 uniformados han protegido las calles francesas.

Y es que en Francia viven unos tres millones de marroquíes y tras finalizar todos los encuentros de la selección magrebí se habían producido altercados en la capital y otras ciudades francesas.

Asimismo, existía el temor entre las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado a que delincuentes de origen marroquí aprovechasen el tumulto para desvalijar tiendas de lujo en la capital, como ya se había producido con anterioridad.

El incidente más grave de la noche la ha protagonizado un adolescente de 14 años que, tras tratar de arrancar una bandera francesa de un vehículo en Montpellier, ha resultado atropellado y ha perdido la vida, cuando el conductor ha emprendido la marcha, arrollando al menor, informa Le Figaro.

Un centenar de detenidos solo en París

La noche se ha hecho larga en las ciudades del país vecino para las fuerzas del orden, que han realizado unas 170 detenciones, un centenar de ellas solo en París, tras la victoria por 3-0 de los franceses.

Pasadas las once de la noche, efectivos policiales realizaron una carga en los Campos Elíseos, después de que aficionados, sin especificar su nacionalidad, lanzaran fuegos artificiales, poniendo en riesgo la integridad física del resto de asistentes, informa la agencia AFP.

Según recoge Le Figaro, la Policía también detuvo durante la madrugada a cuatro decenas de miembros de grupos de ultraderecha que trataban de acceder a las zonas de celebración en París con «armas prohibidas».