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El tenista español Carlos Alcaraz y su entrenador, Juan Carlos Ferrero, posan con el trofeo del Conde de GodóEFE

Siestas de 20 minutos y un «buen entorno»: la receta del éxito de Alcaraz

Los últimos 36 días de Carlos Alcaraz se resume en tres títulos: Master 1000 de Miami, Conde de Godó y Masters 1000 de Madrid. Comenzará la semana del 9 de mayo siendo el número 6 del ranking ATP. Metódico donde los haya, el tenista español acumula una serie de ingredientes que son claves de su éxito.

Siesta, sushi y ajedrez

El joven tenista español, según reconocen en su entorno, duerme ocho horas y tiene una gran facilidad para conciliar el sueño. Sin embargo, no renuncia a una siesta rehabilitadora de 20 minutos antes de los partidos. Una manía, que vistos los resultados, le sienta de maravilla. Cuando era una joven promesa y los flashes no apuntaban a sus victorias, los focos captaron una imagen que se hizo viral cuando antes de debutar en la finales de las Next Generations del año 2021, el español no renunciaba a su habitual siesta previa al encuentro mientras en la pista jugaban Nakashima y Cerúndolo.

Carlos Alcaraz durmiendo una siesta antes de debutar en las Next Generation ATP FinalsTENNIS TV

Además, a Alcaraz le gusta cultivar y trabajar su agilidad mental a través del ajedrez. Conocidos son también sus duelos con miembros de su equipo antes de los encuentros Suele jugar partidos antes de sus compromisos.

El murciano ha experimentado un gran cambio físico y nunca ha tenido problemas con su alimentación. Como buena estrella tiene sus manías o costumbres y una de ellas es la de disfrutar del sushi antes de de los partidos.

Una familia, más que un equipo

Detrás del excelente recorrido que Alcaraz está demostrando y del que tiene por delante, hay un trabajo exhaustivo detrás. El principal, el suyo, lógicamente, pero también el de un nutrido elenco de personas que conforman un equipo muy unido y dedicado a la mejora permanente del juego, el físico y la mente del tenista.

Juan Carlos Ferrero se convirtió en el tutor deportivo de Alcaraz hace cuatro años. Desde entonces, ha guiado su carrera y se ha convertido en casi un hermano mayor para él. Tal es la relación entre entrenador y jugador que cuando falleció el padre de Ferrero, el tenista murciano no dudó el dedicar su triunfo en Miami a su entrenador, quien sorprendió a Alcaraz llegando para ver la final.

Junto al valenciano trabajan tres fisioterapeutas (Fran Rubio, Sergio Hernández y Juanjo Moreno), dos preparadores físicos (Alberto Lledó y Álex Sánchez), Isabel Balaguer, directora de la unidad de investigación de psicología del deporte de la Universidad de Valencia y, por último, su manager, Albert Molina. Ese es el círculo de confianza de Carlos Alcaraz, del que quiso acordarse el número seis del mundo cuando levantó el título en Madrid: «Sin vosotros, no habría sido posible ganar».

Un entorno familiar adecuado

Ferrero, en una entrevista hace unas semanas en El Partidazo de COPE resaltó lo fundamental de tener detrás un entorno familiar que, además de apoyar la carrera del deportista, sepa mantener el temple suficiente cuando el éxito se vislumbra.

«Pies en el suelo, siempre se lo digo. Tiene una familia súper bien educada en valores y muy tenística, que no es fácil de encontrar», detalló su entrenador: «Mentalmente ha madurado y ha crecido», añade, además de destacar que ha aprendido a «leer muy bien los partidos». Sus padres, Carlos y Verónica, disfrutan con los éxitos de su hijo y son su mejor apoyo y sus mejores consejeros. Carlos Alcaraz triunfa dentro y fuera de las pistas sostenido por un equipo deportivo y familiar que lo guían hacia lo más alto.