Una espontánea se encadena a la red en la semifinal de Roland Garros

Una espontánea saltó a la pista central de Roland Garros cuando se disputaba este viernes la segunda semifinal masculina del torneo entre el noruego Casper Ruud y el croata Marin Cilic.

El partido, que finalmente ganó Ruud -que será rival de Rafa Nadal este domingo- se tuvo que detener ante la aparición de esta manifestante, que llevaba la cifra 1.028 en la camiseta.

La joven saltó al centro de la pista de la Philippe Chatrier en el tercer set y en un momento en el que Casper Ruud se disponía a continuar el juego con su servicio. De repente irrumpió en la red, se colocó de rodillas y se ató a ella con una especie de esposa que llevaba colgada a su cuello.

Esto provocó un importante parón y los jugadores se tuvieron que marchar a los vestuarios cuando en ese momento el marcador era favorable al noruego, que había perdido el primer set por 3-6 pero había conseguido llevarse la segunda manga por 6-4. En el momento de la interrupción -que llegó cuando se llevaba algo más de dos horas de juego- Ruud ganaba el tercer set por 4-1.

El motivo de la protesta se debe a una queja climática que clama con el lema «Nos quedan 1.028 días» y con una campaña con la que piden la «rehabilitación energética obligatoria para todas las viviendas» y que esto sea costeado al 100% por el Estado.

La pausa por este sorprendente hecho duró un cuarto de hora, antes de que la espontánea fuera evacuada y los dos tenistas pudieran regresar a la pista para continuar esta segunda semifinal del torneo masculino de Roland Garros.

La realización del torneo captó justo el momento en el que la manifestante se ató a la red, pero al percatarse realmente de lo que estaba pasando cambió de plano y no volvió a sacar más imágenes de la espontánea.