Paula Badosa desvela que Estados Unidos quiso ficharla: «Nunca dudé porque siempre me he sentido española»

Paula Badosa es en estos momentos la mejor tenista española en el ranking WTA. A pesar de que lleva un tiempo a un nivel irregular que le ha hecho salir del top 10, la jugadora de 25 años está recuperando su tenis y habrá que seguirla muy de cerca en la gira de tierra batida que arranca la semana que viene, pues tendrá una oportunidad de oro para escalar muchas posiciones.

Sin embargo, la que llegara a ser número 2 del mundo tuvo la posibilidad de competir bajo la bandera estadounidense, pues cabe recordar que es de padres españoles pero nació en Nueva York y además ha vivido en varias ciudades de Estados Unidos. Por eso, cuando fue a dar el salto al profesionalismo tuvo ofertas tanto de la federación americana como de la española.

No obstante, tal y como ha reconocido en una entrevista a Marca, ella siempre tuvo claro que quería competir por España, pues cabe recordar que también ha vivido en numerosas ciudades españolas y que posee ambas nacionalidades: «En su momento tuve ofertas de Estados Unidos y de España, pero nunca dudé porque siempre me he sentido española».

Además, durante la entrevista con el citado medio, la tenista española habló sobre sus próximas metas, pues aunque haya pasado unos meses algo irregulares, no hay que olvidar que ha estado muy cerca de ser la número 1, una posición a la que no va a renunciar nunca. «El sueño y la ilusión de ser número 1 y ganar un Grand Slam van a estar ahí hasta el día que me retire. Es por lo que trabajo y me levanto todos los días».

Rafa Nadal, su ídolo

Otra de las cosas que más se ha comentado siempre sobre Paula Badosa es su admiración por Rafa Nadal. Quienes conocen a la española afirman que está prácticamente todo el rato viendo tenis independientemente del nivel, pero que siempre ha tenido un favorito claro y ese no es otro que el manacorí.

De hecho, la española recordó cómo fue la primera vez que conoció a Nadal, un día que nunca olvidará: «Era mi ídolo desde muy pequeñita. La primera vez que me lo crucé me puse tan nerviosa que no me atreví a pedirle una foto y tuvieron que pedírsela por mí».

Es más, Badosa admitió que todavía hoy, después de muchos años conociéndole, se sigue poniendo nerviosa cuando le ve. «Siempre es tan normal, tan educado y te hace sentir tan a gusto... Aunque tengo que reconocer que cada vez que le veo me sigo poniendo nerviosa», admitió Badosa.