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Carlos Alcaraz ha vuelto a caer eliminado antes de tiempoEFE

La irregularidad de Carlos Alcaraz genera dudas: ¿tiene opciones de ser un número 1 longevo?

Nuevo batacazo para Carlos Alcaraz, esta vez en el Masters 1000 de Paris-Bercy. Desde que ganara Wimbledon el pasado mes de julio, el murciano apenas ha podido tener continuidad en su tenis. En la mayoría de torneos ha caído antes de lo que le hubiese gustado (solo ha ganado en Pekín) y lo peor es que ha dejado la sensación de ser un tenista muy irregular y que necesita estar en su mejor nivel para ganar partidos.

Seamos sinceros, el año del tenista español no ha sido bueno. Es cierto que ha ganado Roland Garros y Wimbledon y que cualquier jugador del planeta habría firmado su temporada. Sin embargo, más que un buen año ha tenido grandes semanas y ha sabido llegar en un pico de forma a dos de los cuatro Grand Slams del año. Gran premio, pero Carlitos debe aspirar a mucho más.

La grandeza de Roger Federer, Rafa Nadal y Novak Djokovic siempre ha estado en que eran capaces de ganar partidos y torneos sin estar bordando su tenis. Eso de momento no le pasa a Carlitos, pero sí a Jannik Sinner, quien esta temporada se ha convertido en el jugador más fiable y a sus dos títulos de Grand Slam (Open de Australia y US Open) le ha sumado tres M1000 y dos ATP 500 que le han alzado a lo más alto del ranking sacando 4.300 puntos a su principal perseguidor, Alcaraz.

El pupilo de Juan Carlos Ferrero tiene 7.120 puntos, de los cuales 4.000 son por los títulos de Roland Garros y Wimbledon, 1.000 por Indian Wells y 500 de Pekín. Es decir, 5.000 puntos son por haber levantado trofeos, lo que quiere decir que o gana el torneo o cuaja un papel muy pobre. Buenas semanas sueltas pero falta regularidad, pues esta temporada solo ha jugado semifinales en los cuatro eventos que ha ganado y en Buenos Aires, un torneo menor.

El problema de las superficies

A día de hoy, Carlitos es un experto en superficies blandas (tierra batida y hierba), pero sufre un mundo en pistas rápidas, donde más torneos se juegan a lo largo del año. Cuando la velocidad es alta, el murciano se atrapa en errores no forzados y sufre para hacer daño a los rivales. En ese sentido ha involucionado en su juego, pues ahora mismo no queda ni rastros de ese Alcaraz que se coronó en el US Open 2022 y se convirtió en el número 1 del mundo más joven de la historia.

También hay que destacar que el joven murciano está trabajando ya como si hubiese superado la treintena. Con solo 21 años está calcando el plan que hizo el Big 3 para alargar su carrera y eso le funciona genial para llegar en condiciones óptimas a determinados torneos, pero le hace no ser regular. Tanto a Roland Garros como a Wimbledon llegó mejor que nadie por la gestión del calendario, pero en el resto de torneos siempre ha dejado dudas y ha terminado pinchando de forma inesperada.

Carlos Alcaraz ha caído en el Masters 1000 de Paris-BercyEFE

El tenis no son solo los Grand Slams, todo cuenta. El número 1 del mundo es un premio a la regularidad, al rendir a buen nivel durante todo el año. Eso no lo ha hecho Carlitos este curso y ahí están los números. Su enorme talento le va a permitir siempre ser un jugador de grande semanas y que cuando esté al 100 % sea invencible, hasta el propio Sinner lo admite. «Alcaraz a su mejor nivel es mejor que yo», aseguró.

El problema es que ese tenis no se encuentra todas las semanas y con la regularidad es donde acaban cayendo los títulos. Todavía tiene tiempo más que de sobra para arreglar lo que le ha fallado esta temporada. Con 21 años tiene que hacer algunos ajustes y entender que su nivel de juego es para dominar el ranking mucho tiempo. Ganar Grand Slams, que ya lleva cuatro, y acumular semanas en el cetro de la ATP, de momento lleva 36.