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El presidente de la Reserva Federal de Estados Unidos, Jerome Powell, ha hecho temblar los mercados al hablar de una inflación persistenteEFE

Crecimiento global

La economía en 2022: entre el optimismo y el miedo a la inflación

Todos esperan que el año que viene sea bueno, pero la subida de los precios mantiene la incertidumbre

Deutsche Bank y Abante, entidad especializada en asesoramiento financiero y gestión de activos, coincidían ayer en su diagnóstico sobre el estado actual de la economía y sus perspectivas sobre el año que viene. «Este año ya ha habido un rebote bastante razonable en los PIBS y el año que viene va a ser muy bueno en términos económicos», señalaba Joaquín Casasús, director general de AbanteDeutsche Bank tiene una previsión de crecimiento cercano al 5 % para la economía española en 2021 y del 6,3 % en 2022, aunque admiten que hay riesgos que pueden producir su rebaja (por ejemplo, un uso menos eficiente del necesario de los fondos europeos). 

El optimismo puede contrastar con las dudas que se tienen sobre la evolución de la economía española, pero a nivel global, ellos lo ven así. También son optimistas con la inflación, aunque con ciertas reservas: «Los bancos centrales están gestionando bien la inflación. Es difícil saber cuándo va a normalizarse, pero lo hará», señala Casasús. Cree que los bancos centrales hacen bien en pensar en una subida gradual de los tipos de interés, no de golpe. 

Rosa Duce, economista jefe de Deutsche Bank, ve preocupante que en Estados Unidos la subida de la inflación se esté trasladando a los salarios. Por ese motivo puede mantenerse una inflación que ya está muy alta: «Hay sectores que tienen problemas para encontrar trabajadores, y por eso la subida se traslada a los salarios. Es lo que preocupa a los bancos. Sería un problema que los salarios subieran mucho, y por ese motivo están reiterando que la inflación es temporal. Por otro lado, en Estados Unidos la inflación subyacente (no incluye precios de la energía ni la alimentación sin elaborar) está por encima del 2 %. En España y Europa está por debajo». En Estados Unidos, por tanto, tienen más problemas que aquí.

El responsable de Renta Variable de Deutsche Bank, Diego Jiménez Albarracín, cree que solo se producirá una subida de tipos y será a final de año: «Ahora no es el momento de tomar decisiones sobre políticas monetarias. Cualquier error de los bancos centrales nos llevaría a un escenario muy negativo». No sería algo que conviniera a Biden, con su imagen en caída libre, ni a Powell, presidente de la Reserva Federal, a quien ha renovado recientemente en su mandato.

Cadenas de suministro y Bolsa

Rosa Duce estima que los cuellos de botella provocados por las cadenas de suministro durarán «hasta verano del año que viene o después». 

En cuanto a los mercados financieros, Diego Jiménez afirma que hay «un gran problema con la Bolsa española: las gestoras internacionales la han abandonado. La ven como Latinoamérica. La diversificación de grandes empresas españolas se dirigió a aquella zona. Al no tener países como Brasil o México los crecimientos de hace años, no están bien vistas por las gestoras». El Ibex lleva un final de año difícil y varios meses sin poder recuperar y consolidar los 9.000 puntos.

Sobre la nueva variante del virus, ómicron, el presidente de Abante, Santiago Satrústegui, estima que «va a tener poco recorrido», aunque tiene lógicamente consecuencias sobre sectores como el turístico y su cotización. 

Como especialistas en inversión, desde Abante y Deutsche siguen destacando el nulo interés de la renta fija si se quiere dar rentabilidad a los ahorros. En este sentido, Satrústegui apuntaba una pista refiriéndose a sus productos: su fondo de fondos de bolsa ha tenido una rentabilidad media del 11 % en los últimos años; el más conservador, el que tiene la mayoría, con una cartera moderada, ha sumado un 5 % en un entorno como el actual, de crisis y de tipos de interés bajos. No son malas referencias para pensar dónde poner los ahorros de cara a un año que en principio va a ser de crecimiento, pero que tiene algunas incertidumbres en el horizonte.