Nueva ley
ERC y PNV amenazan con tumbar la reforma laboral de Pedro Sánchez
Los independentistas la consideran insuficiente y han adelantado que votarán «no»
Tanto el PNV como ERC han dejado clara su postura de no apoyar la reforma laboral que propone Pedro Sánchez.
El presidente de la Generalitat de Cataluña, Pere Aragonès, confirmó este jueves que ERC está «muy lejos» de apoyar la reforma laboral porque la consideran insuficiente. En este sentido, Aragonès asegura que la reforma que plantea el Gobierno no deroga la reforma laboral del Partido Popular de 2012, sino que se trata de una «reforma de la reforma».
Por su parte, la presidenta del BBB del PNV, Itxaso Atutxa, ha recalcado que votará «no» si no se incluye la prevalencia de los convenios firmados en el País Vasco frente a los estatales. Ha recordado a Pedro Sánchez que no tiene mayoría suficiente en el Congreso, y le ha advertido de que dos años de legislatura es «mucho tiempo», a pesar de que el jefe del Ejecutivo dice que la agotará y llegará hasta 2023.
En una entrevista concedida a ETB1, recogida por Europa Press, la dirigente ha afirmado que el presidente «se tendrá que mojar» si pretende «mantener el apoyo de quienes le hemos ayudado», en referencia a, entre otros aspectos, la transferencia a Euskadi de la gestión del Ingreso Mínimo Vital (IMV).
Atutxa ha denunciado que «ahora nos dicen que existen problemas legales o técnicos». «Llevamos escuchando 40 años que hay voluntad política, pero que técnicamente no se puede hacer», ha dicho.
En este sentido, ha asegurado que «no hay competencias para 20 años. Las competencias se transfieren en su totalidad y para siempre, porque no son algo que tiene España y nos da a nosotros, sino que nos tiene que dar su gestión porque la competencia es nuestra por ley, ya que nos la da el Estatuto».
La dirigente del PNV ha reconocido que «es un momento muy complicado para cualquier gobierno», debido a la pandemia de la covid-19, aunque ha considerado que, «más allá del componente político de este asunto, hay algo que es necesario, y es que corresponde al gobierno vasco adaptar, encauzar y abonar esa ayuda».
«Sánchez ha dicho que las elecciones generales serán sobre diciembre de 2023. Es mucho tiempo. Tienen que pasar casi dos años, y en esos dos años no va a tener mayoría», ha advertido.
Además, la presidenta del BBB del PNV ha destacado que «el miedo no es bueno en política», en referencia a la posibilidad de que, en caso de caer el Gobierno de coalición PSOE-Unidas Podemos, la única alternativa sea un posible gobierno entre PP y Vox. «No creo que sea legítimo en política amenazar a nadie con el miedo», ha añadido.
En todo caso, Atutxa ha asegurado que el presidente del Gobierno es una persona «sensata». «Ahora se tendrá que mojar de verdad para mantener el apoyo de quienes le hemos ayudado. Nosotros no nos hemos movido, nos hemos quedado en lo firmado. Si se mueven los otros, ¿quién rompe el acuerdo?», se ha preguntado.
Reforma laboral
Por otro lado, Itxaso Atutxa ha reiterado que el PNV votará en contra de la reforma laboral pactada entre Gobierno, patronal y sindicatos si no recoge la prevalencia de los convenios firmados en el ámbito de relaciones laborales vasco, y ha criticado que el Gobierno pretenda aprobar dicha reforma por decreto en lugar de como proyecto de ley.
La presidenta del BBB del PNV ha considerado que «el problema» del Ejecutivo es que «se ha sentado en esa mesa sin tener detrás a la mayoría del Congreso». Ha insistido en que su formación ya ha trasladado durante los últimos meses en muchas ocasiones a miembros del Gobierno y a representantes de CCOO y UGT, que no apoyarían esa reforma laboral.
En este sentido, ha lamentado que no ha visto «mucha voluntad» ni por parte de los sindicatos ni por parte de la patronal para recoger la prevalencia de los convenios autonómicos frente a los estatales en el texto de la reforma.
«Nuestro voto no lo van a tener. Es verdad que existe la geometría variable, pero es muy difícil. Creo que Sánchez aún no ha admitido que no tiene mayoría en el Congreso, y a veces las cosas salen y otras veces no», ha afirmado.
Además, ha considerado que, si en lugar de pretender aprobar la reforma laboral por decreto la hubiera llevado a las Cortes Generales como un proyecto de ley, «hubiera logrado un acuerdo mucho mayor».