¿Cuenta el paro como pagador para Hacienda?

El paro, al igual que otras prestaciones por desempleo, se incluyen para la Agencia Tributaria como rendimientos de trabajo. Por lo tanto, a nivel fiscal el paro es considerado como si fuera un salario, por lo que también está sujeto a retenciones.

Límites para presentar la declaración

Las cantidades que se cobran del paro tributan por el IRPF. Sin embargo, todo dependerá del nivel de ingresos. Los contribuyentes que en 2021 hayan ingresado más de 22.000 euros de un solo pagador deberán presentar la declaración de la renta. La única excepción es el paro que se recibe en pago único, que está exento.

Asimismo, puede haber más de un pagador si durante parte del año se cobró de una empresa y otra parte del mismo el paro; o bien porque se percibieron prestaciones de distintas administraciones, como el Servicio Público de Empleo (SEPE) y la Seguridad Social. En este caso, si los ingresos alcanzan los 14.000 –sumando lo que se cobró del paro más lo que se cobró de las nóminas– se ha de hacer la declaración de la renta siempre que lo percibido por el segundo pagador supere 1.500 euros. Si no se llegara a esta cifra, el límite que se aplica es el de 22.000€

Por su parte, si las retenciones han sido menores de lo que correspondía por ingresos (es decir, se ha superado el límite establecido y corresponde pagar más de lo que se ha retenido) también será obligatorio presentar declaración. El SEPE suele aplicar un tipo reducido, algo que se puede modificar mediante el modelo 145 de la Agencia Tributaria.