Subida de precios
Cuatro de cada diez españoles gastarán menos que otros años en irse de vacaciones por la inflación
Seis de cada diez ciudadanos afronta dificultades económicas o vive con lo justo, por lo que teme no poder pagar las facturas en los próximos meses
La histórica subida en el precio de los bienes y servicios está teniendo consecuencias directas sobre el poder adquisitivo de los consumidores de todo el mundo. España no es la excepción, ya que un 21 % de sus ciudadanos reconoce que afronta dificultades financieras, por un 36 % que asegura que vive con lo justo. Solo un 8 % afirma que afronta una situación cómoda y tres de cada diez creen que no les va mal, según un sondeo realizado a mediados de abril por Ipsos y el Foro Económico Mundial en once países.
La mayoría de los encuestados cree que los niveles de inflación se van a mantener altos durante este año (71 %), y teme que esto pueda comprometer su capacidad de pagar las facturas de los próximos meses, especialmente las relativas al consumo eléctrico y de gas (61 %). Tres de cada diez asumen que sufrirán una merma en su estándar de vida, mientras que el 38 % opina que en un año tendrán menos dinero disponible que hoy tras pagar sus principales gastos.
Los consumidores reconocen que lo que más afecta a su calidad de vida es el alza del coste de la comida, de los servicios y de los combustibles, que precisamente están entre las categorías de las que esperan una mayor subida en su precio a seis meses vista. En esta línea, hay que recordar que el último informe del Banco de España cuestionaba la efectividad de la bonificación de 20 céntimos al litro de combustible, al señalar que está beneficiando más a los hogares con mayor renta que a los más humildes.
Para hacer frente a la crisis de precios, los españoles apuestan por gastar menos dinero cuando salgan (50 %) o para irse de vacaciones (40 %), siendo el segundo país donde hay más gente dispuesta a hacer un recorte en este capítulo, solo por detrás de Turquía (41 %). Además, un 39 % de los ciudadanos admite que va a optar por dejar para más adelante sus compras más costosas y un 34 % se inclina por reducir su consumo de electricidad, calefacción o agua.
Los españoles reparten las culpas de la crisis en varios frentes. Ocho de cada diez encuestados creen que esta problemática ha sido causada por la situación económica mundial (82 %) y la guerra de Ucrania (78 %), aunque una proporción importante también responsabiliza a las empresas, por llevarse beneficios excesivos de su actividad (72 %), a los cuellos de botella generados por la covid (70 %) o a las medidas económicas del Gobierno Sánchez (69 %).