Crisis de la inflación
Alemania vuelve a la austeridad y pide al resto de Europa frenar la deuda
El ministro de finanzas, Christian Lindner, marca el camino a los países más endeudados, entre ellos España, a quién Bruselas recomienda recortar gasto público
Los países de la Unión Europea con mayor deuda y déficit comienzan a recibir la presión de la Comisión Europea. El ejecutivo comunitario recomendó a los socios con mayores desequilibrios contener el gasto público. Uno de ellos es España, que con una deuda superior al 115 % del PIB se encuentra muy lejos del límite marcado (60 %) por las reglas fiscales que Bruselas reactivará en 2024.
Un empeño, en el que el Gobierno alemán ya ha empezado a trabajar. Berlín aprobó el viernes volver a la senda de la austeridad. El Ejecutivo de Olaf Scholz retoma la estrategia que la excanciller, Ángela Merkel, aplicó tras la crisis de 2008, esta vez, para proteger a la economía germana de las consecuencias de la guerra en Ucrania.
Alemania reducirá el presupuesto de siete ministerios y recortará personal
«No toda crisis puede servir de argumento para no cumplir con el freno de la deuda», dijo el ministro de Finanzas, el liberal Christian Lindner, que anticipó que el plan de recortes pasará por el parlamento el próximo mes de noviembre. El paquete de medidas incluye medidas destinadas a reducir el déficit. Entre ellas, el alemán anunció un recorte de personal del 1,5 % y una reducción en el presupuesto de siete ministerios.
Líder de los liberales alemanes
La Europa que se encontrará Christian Lindner, el último halcón alemán
Lindner, considerado uno de los halcones de Europa, es uno de los máximos defensores de la vía del recorte del gasto. Alumno del exministro Wolfgang Schäuble, el liberal aseguró que hay razones económicas para retornar a la austeridad como el aumento de los intereses que se está dando en los mercados.
«El aumento de intereses es una clara señal de los mercados a la política de que no se puede seguir como en los últimos años. No nos podemos seguir permitiendo altas deudas. Las deudas de hoy son las alzas de impuestos de mañana», aseguró.
Críticas dentro y fuera del Gobierno
El plan, ya cuenta con crítica dentro de las fronteras del parlamento germano. Desde la oposición, el portavoz de presupuestos del grupo parlamentario conjunto de la Unión Cristianodemócrata y la Unión Socialcristiana (CDU/CSU), Christian Haase, aseguró que el cumplimiento del freno a la deuda está solo sobre el papel y que las cuentas que plantea el Gobierno no son sólidos.
«El ministro de Finanzas se comporta como un conductor que conduce entre la niebla con la esperanza de no chocar con nada y salir de allí a salvo y sin provocar un accidente», dijo Haase. El partido de la excanciller Merkel, considera que los presupuestos se basan en datos y proyecciones que ya no tienen validez debido a las repercusiones de la guerra en Ucrania y a la fuerte inflación.
Lindner cuenta además con resistencia dentro del propio Gobierno. Desde el inicio de la coalición tripartita, socialistas, liberales y verdes han chocado con respecto a la estrategia económica que debe seguir la locomotora europea. El enfrentamiento entre Christian Lindner y el líder del partido Verde, Robert Habeck -ministro de Economía y Clima- estuvo a punto de desbaratar la formación del gobierno.