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Un hombre pasa junto a una pared con carteles que representan al presidente ruso, Vladimir Putin, en Varsovia, Polonia

Un hombre pasa junto a una pared con carteles que representan al presidente ruso, Vladimir Putin, en Varsovia, PoloniaGTRES

En junio

Dos 'traders' suizos y uno asiático, detrás del repunte de las compras de gas ruso en España

La especulación de tres intermediarios internacionales inflaron las compras de gas ruso en junio. Rusia se convierte en el segundo mayor proveedor de España

Rusia da un vuelco al mercado energético europeo. Los países comunitarios aprovecharon los últimos días de junio para lanzarse a una compra desesperada ante el temor a un corte definitivo del gas ruso, fruto de la tensión geopolítica desbocada tras meses de guerra en Ucrania. España –junto al resto de socios europeos– continuaron comprando la energía de Gazprom, a pesar de los vetos y sanciones que Europa ha impuesto contra el presidente ruso, Vladimir Putin, y su entorno.

Sin embargo, junio marcó un récord. Durante el sexto mes del año, ocho buques con bandera rusa descargaron gas natural licuado en las costas españolas. Un repunte extraordinario que responde a un movimiento de especulación por parte de diferentes compañías de trading, o intermediarios, de materias primas con presencia en España. Según ha podido averiguar El Debate, hasta tres traders habrían elevado sus compras de GNL ruso aprovechando el menor precio marcado en junio, para venderlo posteriormente cuando éste se haya disparado.

El precio del gas se ha duplicado en tan solo un mes

Se trata de una compañía con sede en Singapur, Trafigura; y otras dos con sede en Ginebra, Vitol y Gunvor. Todas ellas se estarían aprovechando de la capacidad de regasificación española –muy superior a la del resto de países europeos– para aprovechar el estallido de la crisis de la energía. «Estas empresas estarían comprando la energía a Novatek (proveedor de Gazprom) con un descuento importante con la condición de que les paguen en rublos o yuanes», afirma una fuente del mercado que prefiere no revelar su identidad.

Desde que Putin anunciara el cierre escalonado del suministro, el precio no ha hecho más dispararse. El pasado 8 de junio el gas en el mercado holandés (de referencia en Europa) marcaba los 81,4 euros, un mes después –el pasado 7 de julio– el precio tocó un máximo al escalar por encima de los 183 euros.

Todo ello está impactando con fuerza en los recibos de los consumidores. No solo en la factura del gas –cuyo consumo doméstico es más reducido debido al periodo estival– sino en la eléctrica. La luz sigue disparada. Este martes se pagarán 303,07 euros/MWh, un precio disparado por el elevado importe de la compensación a las centrales de ciclo combinado. El incremento de la demanda francesa, el efecto de la ola de calor, la caída de la generación eólica y el encarecimiento del gas en el mercado ibérico, han desbocado el recibo que se pagará a lo largo del día.

Las energéticas españolas niegan haber disparado las compras rusas

Al margen quedan las compañías españolas que importan mensualmente gas ruso. «El dato del suministro de GNL con origen ruso para junio de 2022 se corresponde con operaciones ya programadas con anterioridad al estallido del conflicto», afirman fuentes del sector gasista. Los contratos comerciales que atan a empresas energéticas españolas con las rusas cuentan con una duración a largo plazo, por lo que el efecto de las sanciones no es inmediato.

Según el boletín de junio difundido por Enagás, un 24,4 % de todo el gas importado por España procedía de Rusia. De hecho, Moscú se situó el mes pasado como el segundo mayor suministrador, por delante de Argelia y algo por debajo de Estados Unidos.

La vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera

La vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa RiberaEFE

«Es conveniente que lo comercializadores busquen reducir al máximo las importaciones de gas ruso, a pesar de que este criterio no esté incluido explícitamente en los paquetes de sanciones aprobados», dijo la vicepresidenta tercera, Teresa Ribera, en la rueda posterior al Consejo de Ministros. Fuentes del sector afirman que las compañías españolas tratan de blindar los depósitos de gas ante un futuro racionamiento en Europa que demande el envío de excedentes a los países más afectados por el corte total de la energía rusa.

Las reservas españolas, al 71 %

Las reservas españolas se mantienen a buen ritmo. Los almacenes subterráneos han aumentado sus depósitos y, a fecha de 1 de julio, están al 71,2 % de su capacidad. También las plantas de regasificación trabajan a pleno rendimiento, especialmente las ubicadas en Barcelona y Cartagena.

Desde el Gobierno, la ministra de Industria, Reyes Maroto, ha pedido calma. «Vuelvo a trasladar tranquilidad, somos un país que tiene el suministro garantizado y, por lo tanto, lo que estamos ahora elaborando son planes de contingencia, así que tranquilidad, ya lo ha dicho también la ministra Ribera», dijo este lunes desde Logroño.

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