Crisis como la de Evergrande han conducido a un frenado en las ventas
Crisis
La burbuja inmobiliaria de China explota en medio de un espectáculo desolador
Los propietarios no quieren pagar hipotecas y las empresas aceptan cosechas a modo de anticipo
Con Evergrande empezó todo. Con la quiebra de una de las grandes empresas constructoras en China comenzó a explotar, poco a poco, la burbuja inmobiliaria de China. Un país lanzado a alzar edificios cuanto más altos mejor porque la demanda era alta y el precio, también.
«El nuevo colapso inmobiliario jamás visto» dicen en The Guardian de esta situación que empezó hace dos años en China cuando su Gobierno empezó a adoptar medidas drásticas para pinchar la burbuja que estaba provocando situaciones inverosímiles.
Boicot hipotecario
Los promotores vendían sobre plano y, con ese dinero, ponían en marcha otros proyectos. Ahora los compradores se niegan a pagar hipotecas por apartamentos a medio hacer que ya han bajado su precio un 40 % respecto a 2021, fecha en el que se vendieron.
Incluso los organismos públicos locales están sufriendo el problema inmobiliario. Han pasado muchos años vendiendo terrenos a promotoras y generando una cuantiosa vía de ingresos que ahora ha cesado de forma repentina.
Este sector representa casi el 25 % de la economía total de China por el consumo de materiales o electrodomésticos además del alquiler o las empresas intermediarias que gestionan primeras y segundas ventas.
China limitó los préstamos a los promotores y fijaba límites de deuda, apalancamiento y liquidez con lo que los problemas empezaron a llegar hasta la quiebra de Evergrande y otras 30 empresas más que han dejado de pagar la deuda externa. Una cantidad valorada en 220.000 millones de dólares en préstamos sobre proyectos.
Las propiedades rurales también sufren las consecuencias del pinchazo inmobiliario. Las constructoras aceptan las primeras cosechas a modo de anticipo y ya se habla de melones y sandías a cambio de una casa.
Sorpaso demográfico
China experimenta un cambio demográfico importante y se espera que India supere al gigante asiático en cuanto a número de habitantes a lo largo de 2023. Este dato reduce la demanda y eso obliga pensar en el nuevo modelo económico de un país que en los próximos meses espera prorrogar el mandato de Xi Jinping.
