Crisis energética
Gobierno y PP sientan las bases de un Plan de Contingencia común y volverán a reunirse
En la reunión «se ha puesto de manifiesto la voluntad de ambos de trabajar en una respuesta conjunta, también con el resto de fuerzas políticas, en pos de alcanzar el máximo consenso posible»
La vicepresidenta tercera, Teresa Ribera, volverá a reunirse con el responsable económico del Partido Popular. Tras casi tres horas de reunión, la ministra y el popular Juan Bravo han acordado seguir avanzando en un Plan de Contingencia común de ahorro energético. Según el ministerio de Transición Ecológica, el encuentro ha servido para trazar las bases de un futuro acuerdo. «Dicho documento es la base para seguir trabajando en medidas destinadas a proteger a ciudadanos y empresas del alza de las facturas energéticas», apuntan desde el departamento que dirige Ribera.
El encuentro se gestó tras el intercambio de mensajes de Whatsapp entre la titular de Transición Ecológica, Teresa Ribera, y Bravo. La reunión -que comenzó a las 18.30 horas en el ministerio de Transición Ecológica- buscaba confrontar modelos de ahorro energético.
«Estamos en un momento difícil, las decisiones que hoy tomemos una incidencia en lo que va a ser este país en las próximas décadas», ha asegurado Juan Bravo tras la conclusión de la reunión. El popular ha destacado el buen tono del encuentro en el que la vicepresidenta ha dado cuenta del avance de las negociaciones en la Comisión Europea.
Diferencias en cuanto a impuestos, nuclear y plan de ahorro
El portavoz de Economía popular ha llevado bajo el brazo un documento de propuestas con el objetivo de adaptar las medidas del Ejecutivo al plan aprobado por la Comisión Europea. El pilar principal apunta al impuesto temporal a los ingresos de las energéticas que el Gobierno llevó la pasada semana al Congreso de los Diputados. El gravamen difiere del impulsado por Bruselas que señala a los beneficios extraordinarios y no a la facturación anual. Moncloa se comprometió hace unos días a alinear ambos mecanismos.
Bravo -según fuente populares- habría pedido a la ministra retirar el impuesto a la banca que el Ejecutivo abandera en el Congreso de los Diputados, a cambio de apoyar la tasa a las energéticas. Un punto en que no se ha logrado un consenso. «No todo ha sido positivo. Hay elementos en los que no nos encontramos. Ellos van a seguir hacia adelante con el impuesto a las energéticas y la banca. Ahí tenemos diferencias», dijo Bravo.
Tampoco hay consenso en cuanto a la política nuclear o al contenido del plan de ahorro energético. Desde el PP piden que el paquete de medidas que imponen el apagón de luces y temperaturas máximas y mínimas debería ser voluntario, y no obligatorio.
Dentro del catálogo de exigencias populares se incluye la bonificación en la factura de aquellas familias y pymes que reduzcan su consumo energético abanderada por los populares. La ministra considera que, de llevarse a cabo, ésta beneficiaría a los más favorecidos en detrimento de los vulnerables. Sin embargo, la mayoría de los expertos aprueba esta vía, ya que desincentiva la demanda y garantiza un mayor ahorro energético.
En el plano fiscal, el Partido Popular se arroga la rebaja del IVA del gas al 5 %. La medida, anunciada por el presidente Pedro Sánchez, había sido reclamada días antes por el presidente popular, Alberto Núñez Feijóo. Una reducción de la carga impositiva, que Génova quiere extender al butano.
Por último, los populares han pedido a Ribera la creación de una AIREF energética destinada a revisar la fórmula de fijación del precio de la energía.