Trompazo monumental del turismo en agosto comparado con 2019

Adriano Celentano cantaba la canción Chi non labora non fa l´amore, que podría traducirse por «quien no trabaja se entrompa».

Porque eso es lo que le está pasando a la ministra del gremio y por ende al Gobierno entero.

La industria nacional número 1 de nuestra economía es el turismo, y ¿qué hacemos por cuidar, vigilar, apoyar y tratar de que esa industria no se estanque y crezca?

Pues si no lo sabe usted, querido lector, yo tampoco lo sé.

Por aquello de ser un poco malo, decido meterme en la página del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo para comprobar de qué va la opción muy bonita que se llama «Reactivatur». Pincho en ella y me da múltiples opciones. Escojo, por ejemplo, Andalucía y Estatal, para ver las ayudas a la Reactivación del Turismo, y me aparecen dos ayudas, una del 22 de diciembre del 2020 y otra de marzo del 2021. Desde entonces el Ministerio no ha hecho nada por Andalucía.

Y como soy muy perverso, hago lo mismo para Madrid, y van y me salen las mismas ayudas, y repito con Cataluña, y más de lo mismo, así que hago una cata con dos más y el mismo resultado.

La vagancia, la falta de compromiso con la primera industria del país es tal, que esto debería ser el titular con que abriesen todos los telediarios. El Ministerio encargado del Turismo no ha hecho nada para reactivar el turismo desde marzo de 2021.

Reyes Maroto, que es economista y profesora universitaria, debería saber que lo que no se riega no crece, sea una flor, sea una relación de pareja o sea la principal fuente de ingresos de nuestra balanza comercial.

Y por los motivos que sea, ha decidido no regarla, quizás porque la simpleza del número provoca alegrías insanas. Si miramos el resultado del turismo español contra el año 2021, en que los primeros meses hubo muchísimas restricciones para volar, los resultados sin regar van a ser buenos. Vamos a crecer a tres dígitos menos a partir de agosto, que ya solo crecemos a dos dígitos. Y el dato es apabullante.

Pero lo más apabullante es que hasta agosto nos hemos dejado de traer a España más de 10 millones de turistas, comparativamente con el 2019, que fue nuestro año estrella. Ahora nos estamos estrellando. No solo nos hemos dejado ya 10 millones: es que en agosto nos hemos dejado 1,3 millones, lo cual es un choque frontal contra un bloque de granito puro.

Alguien podrá hacer el chiste de que menos mal que no te regaron el suelo, y al menos los frenos funcionaron con el choque. Es verdad, porque a veces cuando se hacen cosas y se hacen mal, es casi peor.

Así que hagamos el uso del dato, para saber dónde nos la estamos dando.

Primero, en el mes de agosto han llegado 8,8 millones de turistas, pero frente al 2019, que llegaron 10,1 millones, nos hemos dejado 1,3 millones de turistas solo en un mes.

Esto significa una caída del 12,8 %, pero si miramos a nuestros 9 clientes más importantes, sucede que con estos solo perdemos el 7,7 % en el mes de agosto, y eso que Rusia aporta cero en este mes.

Lo cual quiere decir que una acción bien montada por iniciativa de nuestro ministerio del gremio podría haber paliado estos efectos.

Hay 3 países que han superado las cifras del 2019: Países Bajos, Italia y, nuestro vecino, Portugal. Gracias a ellos hemos recuperado casi medio millón de turistas, siendo espectacular el crecimiento de los turistas italianos, que han sumado 370.000 turistas extras.

Reino Unido sigue siendo el país que más turistas envía en el mes de agosto, seguido de Francia y Alemania, pero entre los 3 países hemos perdido, frente a 2019, a casi 740.000 turistas, aunque Alemania ha estado cerca de igualar su cifra.

Desde el punto de vista del año completo que llevamos, hemos perdido ya 10 millones de turistas, y lo que nos queda es más sufrimiento de aquí a finales de año.

Sólo Países Bajos se ha comportado mejor que en el 2019. Con Reino Unido hemos perdido 2,4 millones de turistas, con Alemania y Francia otros 2.3 millones y así podemos ir contando hasta los 10 millones que no han venido, que este año no vendrán y que no sabemos si como las oscuras golondrinas algún día volverán.

Tenemos un Ministerio de Industria (16 % del PIB), Comercio (14 % del PIB) y Turismo (12 % del PIB) que no está ni se le espera. Que no parece que «labore» mucho, y que si lo hace, solo lo saben los trabajadores del Ministerio.

Estamos ante un grupo de ministros que han perdido su personalidad para asumir la del troglodita de personalidades que es el presidente del Gobierno, que fagocita las partes buenas de sus ministros y las deja las malas.

Tenemos una ministra encargada del 42 % del PIB que tendría que ser la abeja reina de la colmena y tener a toda la colmena produciendo para que al final del ejercicio su ministerio fuese al menos el 44% del PIB, pero el problema es que no hay abeja reina, no hay abejas y no hay colmena, solo desidia y palabras huecas.