Crisis energética
El plan del Gobierno para rebajar el recibo de la luz: ¿quién se beneficiará?
El Consejo de Ministros aprueba un plan para reducir la factura a los consumidores energéticos más vulnerables. Las comunidades de vecinos con calefacción central, podrán acogerse a la Tarifa de Último Recurso
El Gobierno aprueba un paquete de medidas destinadas a aliviar la factura energética de los hogares españoles. El plan demanda la movilización adicional de 3.000 millones de euros y que con ellas se llegará a proteger al 40 % de las familias españolas.
Mayor descuento para los beneficiarios del bono social
Una de las medidas pasa por una nueva ampliación del descuento que las eléctricas tienen que hacer a los 1,3 millones beneficiarios del bono social eléctrico, entre los que se encuentran los hogares vulnerables y las familias numerosas.
Para ellos, el descuento pasará del 60 % actual al 65 % para los consumidores considerados vulnerables y del 70 al 80 % para los vulnerables severos. Antes de que se desatara la actual crisis energética los descuentos eran del 25 y del 40 %, respectivamente.
Además, se eleva un 15 % la cantidad de energía con derecho al descuento, hasta los 1.587 kilovatios/hora (KWh) anuales para unidades de convivencia sin menores; 2.221 KWh para familias con un menor y para pensionistas; 2.697,9 KWh para las de dos menores, y 4.140 KWh para familias numerosas.
Los hogares con «ingresos reducidos», dentro del descuento
Pero la principal novedad dentro del bono social es la creación temporal de una nueva categoría de consumidores con derecho a un descuento del 40 % en la factura, al que se podrán acoger 1,5 millones de «hogares trabajadores con ingresos reducidos». Podrán acceder a ese nuevo descuento personas que vivan solas y ganen hasta 16.000 euros al año, parejas que ingresen 20.000 euros o familias que ganen 28.000.
Además, se duplica el presupuesto en 2022 y 2023 del bono social térmico para hogares vulnerables, con lo que se doblará la ayuda media hasta los 375 euros por hogar y se elevará la mínima a 40 euros, frente a los 35 euros actuales.
La comunidades de vecinos, dentro de la TUR
Además, el Consejo de Ministro ha aprobado una nueva tarifa de último recurso (TUR), o tarifa regulada de gas, para comunidades de vecinos con caldera centralizada comunitaria de gas natural.
Hasta ahora las comunidades de vecinos con ese sistema de calefacción no podían contar con una tarifa TUR -más barata que las que se ofrecen en el mercado libre-, que está limitada a un consumo de menos de 50.000 kilovatios horas al año.
Tampoco podían beneficiarse del límite del 15 % impuesto por el Gobierno a la subida del precio del gas en las revisiones trimestrales que se hacen de la tarifa regulada.
La nueva tarifa regulada para las comunidades de vecinos con caldera centralizada de gas natural permitirá a 1,7 millones de hogares reducir su factura a más de la mitad, según cálculos del Ejecutivo.
Ribera confía en que las comunidades de vecinos que ya han contratado un servicio de gas natural puedan acogerse a la nueva tarifa especial, aunque se necesitará un tiempo.
Impulso del autoconsumo colectivo
Concretamente, el Consejo de Ministros ha aprobado duplicar la distancia máxima que debe haber entre el punto de generación eléctrica en cubierta (los tejados donde se instalan las placas solares) y el de consumo (donde se encuentran los enchufes).
Así, la distancia entre ambos puntos para que una red eléctrica sea considerada de autoconsumo pasa de ser 500 metros a un kilómetro, una distancia que el Gobierno considera «razonable» para evitar en cualquier caso que se creen «parques de autoconsumo rodeando zonas urbanas».
Con esta iniciativa se quiere favorecer que las comunidades de vecinos (el 70 % de los españoles viven en pisos) y los polígonos industriales instalen placas para generación propia y colectiva de electricidad.
Instalación de placas solares
El mismo objetivo tiene la decisión de permitir más de una instalación en una misma referencia catastral, evitando limitaciones al crecimiento en lugares donde ya haya una planta fotovoltaica operativa.
Además, se ha acordado que las instalaciones de menos de 500 kilovatios (kW) no tenga que obtener una autorización previa y de construcción, un límite que hasta ahora era de 100 kW.
El Gobierno explica que estas medidas buscan seguir impulsando el autoconsumo en España, que en los últimos cuatro años se ha multiplicado por diez, con un crecimiento exponencial, de manera que en este año se ha desplegado más de un tercio del total.