Sánchez entra en el cuerpo a cuerpo con De Guindos y 'agradece' en tono irónico sus «ganas de ayudar»

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha decidido entrar en el cuerpo a cuerpo contra Luis de Guindos, actual vicepresidente del Banco Central Europeo, al que ha 'agradecido', tirando de ironía, sus «intentos de ayudar» a su Ejecutivo.

Lo ha hecho desde Portugal. Tras las primeras palabras de los ministros José Luis Escrivá y Félix Bolaños, en la tarde de este viernes ha sido el mismo Sánchez quien se ha manifestado en contra del dictamen del BCE, que un día antes mostró su oposición al impuesto a la banca que pretende aplicar el Gobierno de España.

Sánchez ha comparecido junto al primer ministro de Portugal, António Costa, ante los medios de comunicación en Viana do Castelo, tras la firma de acuerdos bilaterales entre ambos países, un día después de que el supervisor europeo cuestionase distintos aspectos de este gravamen.

«Evidentemente, tomamos nota y estudiaremos el informe, pero el Gobierno continúa con su hoja de ruta de crear este importante impuesto. Sobre todo, porque a la luz de los datos que hemos conocido de los beneficios y los dividendos que está dando el sector financiero como consecuencia del endurecimiento de la política monetaria, creo que está justificado que arrimen el hombro un poquito durante estos tiempos tan difíciles que están atravesando los españoles y las españolas», ha señalado Sánchez tras ser preguntado por el citado dictamen.

Ironía para contestar a De Guindos

El socialista también se ha referido a las palabras que el vicepresidente del BCE, el español Luis de Guindos, había pronunciado previamente subrayando que el dictamen de la institución sobre el impuesto a la banca «trata de ayudar» al Gobierno.

El socialista hizo un repaso del brillante currículum del número dos del supervisor europeo con la intención de desprestigiarle, apuntando a que «es bien conocido por la política española» por haber sido en el pasado ministro de Economía del Gobierno del Partido Popular, artífice del rescate al sector financiero y previamente responsable de Lehman Brothers, para a continuación agradecerle, en tono irónico, sus «ganas de ayudar».

En su dictamen, el BCE también expresó la importancia de que el impuesto pueda repercutirse a los clientes. Preguntado sobre la manera en la que el Gobierno va a garantizar que la banca no traslade el impuesto a los clientes, Sánchez se ha remitido a la redacción del proposición de ley, que plantea que el gravamen no se traslade a los clientes de las entidades financieras afectadas por el impuesto, algo que vigilará la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC).