España ni siquiera aguanta el tipo en las exportaciones

Hace escasamente una semana que Eurostat actualizó las cifras de Exportaciones de Bienes y Servicios, que es una de las partidas más importantes en la composición del PIB, dado que, con el volumen de importaciones que estamos teniendo por la crisis energética, si esta partida no supera a las exportaciones y el resultado neto entre las dos es negativo, lo que se produce es que la Balanza de Pagos o Demanda Externa reste al Producto Interior Bruto.

Las cinco grandes economías de Europa por tamaño son Alemania, Francia, Italia, España y Países Bajos. Les sigue una emergente Polonia, que ya ha sobrepasado a Suecia y Bélgica en Producto Interior Bruto hace unos años.

Una de las formas de que la economía de un país crezca no es precisamente la endogamia productiva, sino la capacidad de producir bienes y servicios que se vendan en el exterior y cuanto más mejor.

Por eso Alemania ha sido hasta ahora el motor de Europa. Uno de los grandes motivos de serlo es que escogió correctamente su estrategia industrial después de la segunda guerra mundial. La industria química y la industria automovilística son sus grandes áreas de exportación. En el sector automovilístico, el grupo Volkswagen lleva varios años colocado como el mayor fabricante mundial de automóviles, seguido por Toyota, que siempre le amenaza con darle el sorpasso pero no lo consigue.

En España nunca apostamos por tener industria propia. Decidimos hace muchos años ser un país de servicios. El turismo ha llegado a ser la clave de nuestras exportaciones, llegando él solo a suponer en el total del PIB más de un 12 %. La otra apuesta fue conseguir que los grandes fabricantes de automóviles tuviesen una posición de prevalencia en España con fábricas en los lugares donde consideraron que eran importantes para ellos.

Renault se implantó en Valladolid, Citroën en Vigo, Seat - Volkswagen en Barcelona, Ford en Valencia, Opel en Zaragoza y Mercedes en Navarra. Hasta que aparece la Agenda 2030 en la que todo tiene que ser verde, los motores deben ser eléctricos y decidimos matar al diésel, todo parecía que iba bien, pero con la aparición de esta Agenda se está dando la vuelta y podemos llegar a tener grandes problemas en el futuro.

Si además nombramos a Reyes Maroto ministra de la Industria, el Comercio y el Turismo y ella sola, sin necesidad de ayuda, se pone a darle patadas en las partes nobles a los fabricantes de automóviles, porque el IDAE no es capaz de sacar a la luz pública los PERTE comprometidos y además deja de cuidar el turismo, resulta que ella sola consigue que la manden de candidata a la Comunidad de Madrid, para que si por casualidad llegase a gobernar convirtiera Madrid en un solar.

Toda esta introducción es para decir que España no es la cuarta potencia exportadora, ni siquiera la quinta, tampoco la sexta, sino que es la séptima, y a este paso, y si nos descuidamos, y aunque todavía está un poco lejos, en unos años hasta Chequia nos puede llegar a sobrepasar.

Como no podía ser de otra manera, Alemania es el país más exportador de la Unión Europea con 638.830 millones de euros. Pero algo está pasando en la economía alemana: comparando las cifras acumuladas a septiembre de este año con las del año 2021 en las mismas fechas, su incremento es solo de un 15,5 %.

El segundo país exportador es Países Bajos, que llega a 479.788 millones de euros y además crece un 35,8 %. Es con diferencia el país que más ha incrementado sus exportaciones en valor absoluto. Ha conseguido exportar 126.611 millones de euros. Siempre habíamos sabido que la antigua Holanda era un país de comerciantes, pero no cabe duda de que lo son, cuando uno ve estas cifras.

La pequeña Bélgica es el tercer país exportador de la UE. Consigue superar los 300.000 millones de euros, llegando exactamente a 303.931 millones, creciendo un 38,2 % en este período y en valor absoluto su incremento es casi igual al de Alemania.

A continuación van Italia y Francia, por este orden, que se quedan las dos en los 245.000 millones de euros de exportaciones, con Italia creciendo un 21,7 % y Francia casi un 25 %.

Sorprende, y mucho, ver que Francia, otro de los grandes países con un sector automovilístico muy importante, está en la quinta posición.

Otra sorpresa es ver a Polonia por encima de España con 189.871 millones de euros, aunque sus exportaciones se han ralentizado ligeramente, al crecer solo un 20,8 %.

Y tal como comentamos, España está en la séptima posición con 184.904 millones de euros y un crecimiento del 25,8 %. A pesar del crecimiento sobre 2021, que fue un año complicado para España, donde el PIB solo creció la mitad de lo que el Gobierno quería, nos sigue dejando en esta posición muy lejos de Francia e Italia y, por supuesto, solo vemos la estela en el cielo de Bélgica y Países Bajos.

En algún momento, en algún lugar, nuestros gobernantes, y no me refiero a estos que hay hoy, porque su sobrada incompetencia es conocida y manifiesta, tendrán que hacer un análisis de lo que económicamente queremos ser en el futuro, porque sino hacemos ese trabajo, lo pactamos con todas la fuerzas constitucionalistas y lo ponemos en marcha, la España del 2030 será peor que la de ahora, y en 2050, quizá ya no somos ni la quinta potencia de la UE.