Los 27 no se atreven aún a decidir si deben congelarse los fondos europeos a Hungría

Los ministros de Economía y Finanzas de la Unión Europea, que debían decidir sobre la propuesta de la Comisión de congelar los fondos regionales a la Hungría de Viktor Orbán, han aplazado su decisión momentáneamente.

Así, el Ecofin ha optado por no seguir adelante con su decisión sobre si deben congelarse esos 7.500 millones pertenecientes a los fondos de cohesión, tal y como desea el equipo de Ursula Von der Leyen.

Este era uno de los puntos en la agenda del día que debían ser tratados, pero que finalmente han sido retirados de la agenda, al igual que la discusión sobre la tasa del 15 % a multinacionales. Por su parte, Budapest trata de ejercer presión con reservas a la ayuda macrofinanciera a Ucrania.

Los expedientes han quedado aparcados por el pulso del Gobierno húngaro, que trataba de vincular su acceso a fondos europeos a otros asuntos clave en la agenda económica de los 27, como la ayuda macroeconómica a Ucrania, que también necesita la unanimidad de los países o la tasa del 15% a las multinacionales.

Castigo de la Comisión Europea

Los mencionados fondos constituyen un nuevo frente en la batalla entre la Comisión Europea y la Hungría de Viktor Orbán por la independencia judicial, entre otras cuestiones de calado.

La CE pretende así seguir presionando a Orbán y ha anunció el pasado miércoles que considera «insuficientes» las reformas de su Gobierno, las cuales le son exigidas para luchar contra la corrupción y a favor de la independencia judicial.

Mediante esta evaluación, los ministros de Economía y Finanzas comunitarios (Ecofin) debían tomar una decisión definitiva sobre la congelación, algo que de momento no se ha producido.