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Montaje Boeing 747, icono de la aviación comercial

Montaje Boeing 747, icono de la aviación comercial

Adiós a la 'reina de los cielos': Boeing entrega el último 747, el mayor icono de la aviación comercial

Desde 2010, la compañía solo había recibido seis pedidos de este modelo

Más de medio siglo después de que el 'jumbo jet' marcara una nueva era en la aviación comercial, este martes se ha entregado el último Boeing 747, conocido como la 'reina de los cielos' y considerado como uno de los mayores iconos de la compañía.

En una ceremonia transmitida en vivo y en línea, la aeronave fue entregada a su nuevo propietario, el operador estadounidense Atlas Air, en la planta Boeing en Everett, Washington. En una espectacular puesta en escena, la entrega tuvo un detalle con los transportistas que alguna vez recibieron el 747 y una calcomanía al lado del morro en homenaje a Joe Sutter, ingeniero jefe de la compañía y considerado por muchos como el padre del avión. Junto a los familiares de Sutter, que falleció en 2016, comparecieron también miembros de Boeing.

Boeing 747

Boeing 747

Boeing 747

Kindelán

«El impacto de su trabajo continúa más allá de las líneas de producción», señaló John Dietrich, presidente y CEO de Atlas Air Worldwide. «Ha alimentado los sueños de la infancia y las ambiciones profesionales, al mismo tiempo que impulsa las economías globales y las cadenas de suministro».

Representantes del sector también tuvieron palabras sobre el icónico avión. «El 747 es un símbolo de muchas, muchas cosas y, sobre todo, creo que es un símbolo para el mundo, que el 747 ha hecho sustancialmente más pequeño», comentó Carsten Spohr, CEO de Lufthansa.

Modelos más económicos

El último 747 que albergó a pasajeros entró en servicio hace cinco años y solo eran adquiridos para transportar carga ya que las compañías preferían modelos más pequeños y económicos. Este modelo tuvo su mayor éxito durante las décadas de 1980 y 1990, pero desde 2020, Boeing solo había recibido seis pedidos del 747.

Actualmente, las aerolíneas buscan aviones bimotores más eficientes en combustible que puedan reducir los costes y las emisiones que contribuyen al cambio climático. Con sus cuatro motores, el 747 tiene mayor potencia, lo que se traduce en cargas más pesadas y distancias más largas, pero también en mayores costes en mantenimiento.

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