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El presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, conversa con Pepe Álvarez (UGT) y Unai Sordo (CCOO).EFE/ Chema Moya

Foro Wake Up, Spain!

Garamendi pide a Yolanda Díaz que le deje en paz

El presidente de la CEOE solicita al Gobierno que le deje trabajar con discreción con los sindicatos, y en otro plano señala que la reforma de las pensiones no se han estudiado bien

El presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, ha señalado en el foro Wake UP, Spain! que es importante que el Gobierno le deje trabajar «con discreción» con los sindicatos en la negociación de la subida de los salarios y en todo lo que tiene que ver con la cuestión laboral: «Es fundamental que el Gobierno nos deje en paz: que no nos diga si tenemos que sentarnos o no. La ministra no es quién para decir quién tiene que sentarse en la mesa. Si hay algo importante en la economía es la libertad», ha dicho.

Garamendi ha querido hablar también sobre la reciente reforma de las pensiones presentada por el ministro Escrivá: «Las pensiones no se han estudiado bien y se ha creado un problema para este país. Deberían estudiarse bien», ha señalado.

El presidente de los empresarios se ha referido también al incumplimiento por parte del Gobierno de los acuerdos que se habían alcanzado. En concreto ha nombrado lo concerniente al artículo 51. La enmienda transaccional incluida en la Ley del Empleo permite que la Inspección de Trabajo y Seguridad Social se pronuncie sobre las causas especificadas por la empresa en la comunicación inicial de un ERE cuando se produce un despido colectivo. Es una modificación al artículo 51.2 del Estatuto de los Trabajadores. «Se lo han saltado por un acuerdo con Bildu. El día en que se pueda, pediremos que se restaure», ha dicho.

Esa modificación fue la que hizo que la CEOE rompiera su relación con el Ministerio de Trabajo, al dejar de considerarlo un interlocutor fiable.

Al margen de estas cuestiones, la CEOE y los sindicatos se han mostrado satisfechos por los diecisiete acuerdos alcanzados en esta legislatura. Ahora sus discrepancias se centran en la negociación de los salarios. Los sindicatos empujan para acelerar argumentando que en España no puede haber un «deterioro estructural en los salarios», con la consecuencia de un «deterioro en el consumo que ya se ha empezado a ver en el último trimestre», como afirmaba Unai Sordo, de CCOO. Garamendi ha reiterado que en el acuerdo sobre salarios deberían estar al menos los dos principales partidos políticos, ya que no debe ser una medida coyuntural, sino para más tiempo, y ha vuelto a quejarse de los impuestos a la banca, las empresas energéticas y la subida de las cotizaciones sociales.