Oficina de la Seguridad Social
El colapso de la Seguridad Social: Escrivá busca un golpe de efecto con la contratación de 747 interinos
Se incorporarán, previsiblemente, en el primer semestre del presente curso tras un 2022 en el que se registraron más de 15.000 quejas ciudadanas debido al retraso de la Administración
Días, semanas... incluso meses. Lograr una cita en la Seguridad Social se ha convertido en los últimos tres años en un gran quebradero de cabeza para millones de españoles.
Ya sea renovar el DNI, pedir cita para el SEPE o solicitar cualquier documento es, en pocas palabras, tarea imposible. Situación realmente dramática que el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, dirigido por José Luis Escrivá, continúa achacando a la pandemia del coronavirus.
Sin embargo, la realidad es que la Administración se ha convertido en una institución caduca y cada vez más envejecida. Desde el sindicato CSIF llevan avisando desde hace meses en la imperiosa necesidad de incorporar a más trabajadores teniendo en cuenta que la edad media de la plantilla oscila en torno a los 60 años. Concretamente, 8 de cada 10 trabajadores tienen más de 50 años, motivo por el que es fundamental la incorporación de nuevas remesas de funcionarios.
Un refuerzo que, al menos en 2023, se va a quedar corto. Hace escasas horas el Gobierno sacaba pecho y anunciaba la incorporación de 747 interinos a las filas de la Seguridad Social. Una llegada que se dará en el primer semestre del año.
A pesar del aire triunfalista desplegado por Escrivá y por toda la plana mayor del ejecutivo de Pedro Sánchez, desde los sindicatos dejan claro que se trata de una medida «insuficiente», ya que en la última década se han destruido cerca de 10.000 empleos.
15.640 quejas en 2022
Sin lugar a dudas 2022 fue el annus horribilis de la Administración en nuestro país. A lo largo del año pasado la web de la Seguridad Social recibió 300 millones de visitas, colapsando –aún más– la precaria situación por la que pasan los 26.000 funcionarios que hay contratados actualmente.
Independientemente del egocentrismo desplegado por el ejecutivo en cualquier cuestión de materia económica, la realidad es completamente la inversa. El Instituto Nacional de la Seguridad Social (INSS) recibió a lo largo del año pasado 15.640 quejas de la ciudadanía. Se trata de un 73 % más que en 2021.
Entre las principales demandas el 64 % de ellas radican en la pobre atención desplegada por los funcionarios, más preocupados de derivar al demandante a la página web que de ser resolutivos.
Con estos datos en la mano, falta por ver si la incorporación de los casi 750 interinos en las próximas semanas marcará la diferencia. Lo que parece obvio es que el retraso y colapso en la Administración proviene, en gran medida, de la digitalización.
La llegada de las nuevas tecnologías ha supuesto un antes y un después a la hora de tramitar cualquier documento, convirtiéndose en un gran inconveniente para nuestros mayores.
