Árqura Homes, el lado bueno del banco malo

Sánchez ha anunciado la «movilización» de 50.000 viviendas de la Sareb –la sociedad creada para gestionar los activos tóxicos de las entidades rescatadas tras la crisis de 2008– para destinarlas a «alquileres sociales». Pero no todo el parqué disponible servirá para este fin, ya que este organismo se reserva los mejores inmuebles para su venta a través de Árqura Homes, el lado bueno del banco malo.

La Sociedad de Gestión de Activos procedentes de la Reestructuración Bancaria (Sareb) nació en 2012 con el objetivo de comprar esos activos de las entidades financieras más afectadas para que pudieran sanear sus balances y ganar liquidez. Entre 2012 y 2013, este organismo compró un paquete de casi 200.000 activos problemáticos por un valor de 50.781 millones de euros pagados a través de bonos avalados por el Tesoro.

El problema es que, en los más de diez años desde su nacimiento, la sociedad apenas ha podido liquidar el 40 % de una deuda que se tiene que devolver en 2027, año en el que la Sareb debería disolverse. Y es que se trata, en muchos casos, de inmuebles en discutible estado o en localidades aisladas que en diez años no se han podido colocar y de difícil revalorización.

De las 46.542 viviendas que tendría la Sareb, la idea de Sánchez es que comunidades y ayuntamientos compren 21.000 de ellas, de las cuales 12.000 no reúnen las condiciones de habitabilidad y necesitan reformas. Otras 14.000 incluidas en el plan están ya habitadas.

Pero dentro de este anuncio, el Gobierno no tiene previsto incluir las viviendas comercializadas a través de Árqura Homes, la verdadera joya de la corona de la Sareb. Constituida en junio de 2019 para maximizar el valor de una cartera por valor de 811, esta promotora prevé levantar más de 17.000 viviendas residenciales de aquí a 2027.

Desde su creación hace casi cuatro años, Árqura Homes ha entregado ya 1.682 viviendas de un total de 5.792 obras iniciadas en 15 comunidades. Además, tiene comprometidas con distintos clientes 3.257 casas y dispone de un total de 8.868 viviendas en diferentes fases de desarrollo o promoción. Es decir, un jugoso negocio que se va a quedar fuera de los «alquileres asequibles» anunciados por el presidente.

Esta compañía estaba participada en un 90 % por la Sareb hasta hace apenas dos meses, cuando la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia autorizó la compra del 10 % que estaba en posesión de Värde. Además, se guardaba una opción de compra sobre Aelca, promotora encargada de la gestión integral y comercialización de la cartera de Árqura Homes.

Piscina, terraza, garaje...

Los 17.095 inmuebles proyectados por Árqura Homes se reparten entre locales comerciales y viviendas de distintas características, aunque casi todas cuentan con garaje, piscina y distintas comodidades. Por ejemplo, destaca Acosta Palma, un proyecto de 82 viviendas de hasta cuatro dormitorios con terraza, trastero, plaza de garaje, piscina y zonas ajardinadas por 520.000 euros. En Benicasim, otro proyecto ofrece 48 viviendas residenciales con terraza privada y dos plazas de aparcamiento, aunque en este caso no se especifica el precio.

Respecto a los proyectos ya terminados, actualmente están en promoción viviendas en Fuenlabrada por 350.000 euros, en Alcalá por 393.000, en Mijas por 500.000, en Coruña por 508.000 o en Gijón por 382.000. Joyas que no estarán disponibles para alquiler social.