Empleo
¿Qué es el 'ghosting laboral' que hace desaparecer a los trabajadores?
Ahora son los empleados los que eligen en qué empresa quieren trabajar después de ser aceptado en varias
El mercado laboral está cambiando a gran velocidad desde la pandemia. El teletrabajo y la jornada de cuatro días son los dos procesos que más rápido se quieren implementar desde muchos países.
En ambos casos, la necesidad de la empresa es que el trabajador tenga la flexibilidad que demanda para que su trabajo sea productivo. Ya pasaron aquellos tiempos donde la jornada laboral era inflexible y de sagrado cumplimiento.
Ocio
Una sociedad dedicada al ocio que trabaja para vivir y que no quiere pasar muchas horas en la oficina porque en casa se encuentra más cómo o le viene mejor para conciliar con la vida familiar, incluso para reducir gastos de transporte o comida.
A estos cambios ahora se une el ghosting laboral del empleado sobre la empresa. Esta situación ocurre cuando un trabajador no se presenta el primer día de trabajo y nunca más se sabe nada de él.
Es posible que el dato de The Greenhouse que afirma que el 70 % de los candidatos es ghosteado por las empresas sea motivo para que ahora sean los empleados los que no tengan problema en no acudir a su puesto de trabajo el primer día.
Recibir cientos de currículos y no dar respuesta a todos genera un gran desasosiego en los candidatos, pero, al existir más oportunidades laborales, muchos trabajadores han decidido que son los responsables de su destino y decidirán dónde van a trabajar.
Fantasma
Un trabajador fantasma es aquel que no se presenta en su lugar de trabajo una vez que tiene todo preparado para formar parte de un nuevo equipo. La mayoría de las ocasiones esto se debe a que ha acudido a muchas entrevistas, ha ido pasando pruebas y en el último momento ha reflexionado sobre cuál de aquellos trabajos donde le esperan es el apropiado.
Desde los departamentos de recursos humanos de las empresas muestran su preocupación por esta práctica y lo achacan a que el futuro trabajador ya no acepta cualquier condición laboral, pero tampoco quiere decir que no a la primera para poder comparar.
A menor cualificación y responsabilidad, mayor posibilidad de que ese camarero o administrativo no dé la cara ni el primer día y se decante por otras ofertas similares que tienen alguna facilidad más.
La reflexión al ghosting laboral es que ya no vale todo para trabajar. Aunque la precariedad es mayor, las pequeñas diferencias marcan dónde quiere ir el empleado porque hasta la competencia por ofrecer un trabajo es grande.