Los motivos por los que Hacienda podría quedarse con el dinero de la comunión

Entre los meses de abril y junio se inaugura la temporada de comuniones, en la que pequeños de entre 9 y 12 años deciden seguir los pasos de Cristo y participar en la eucaristía en compañía de sus seres queridos. Sin embargo, más allá del sentido religioso de esta celebración, son muchos los familiares y amigos que hacen regalos a los pequeños que comulgan por primera vez, ya sea un juego o algún objeto de valor para que recuerde siempre este día tan especial como un sobre con algo de dinero.

Los sobres con dinero no son exclusivo de las comuniones y pueden ser habituales en otro tipo de eventos, como bodas o cumpleaños. Sin embargo, Hacienda ha puesto su ojo sobre ellos ya que, en ocasiones, estos podrían utilizarse para blanquear dinero.

Por supuesto, las transacciones de pequeñas cantidades no están prohibidas en España. Sin embargo, la Agencia Tributaria vigila siempre los movimientos que cumplan ciertas características teniendo en cuenta que, los obsequios de dinero en efectivo, son iguales a una donación y, por lo tanto, están sujetos al Impuesto de Sucesiones y Donaciones.

Según la Ley 29/1987, son donaciones las «adquisiciones de bienes y derechos por donación de cualquier otro negocio jurídico a título gratuito entre intervivos» y sería posible incurrir a sanciones si se excede cierta cantidad sin declarar.

Requisitos para no declarar el dinero de la comunión

En un principio, toda cantidad debe ser declarada. Sin embargo, Hacienda solo investiga las transacciones a partir de 3.000 euros o aquellas realizadas con billetes de 500. Por otro lado, si se opta por realizar una transferencia, esta no podrá ser superior a los 6.000 euros, según la Ley de Blanqueo de Capitales.