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Jubilados sentados en un bancoEuropa Press

Economía  Reto demográfico: menos de dos cotizantes por pensionista en la mitad de las CCAA

Galicia, Asturias, Cantabria, País Vasco, Aragón, La Rioja, Castilla y León, Castilla La Mancha y Extremadura son las 9 regiones en las que hay menos de dos cotizantes por jubilado

Uno de los principales problemas socioeconómicos de nuestro país es el aumento del número de pensionistas frente a la falta de cotizantes. Contamos con la tasa de natalidad más baja de los últimos tiempos y una población cada vez más envejecida.

España se enfrenta a un reto demográfico en el que los problemas procedentes del mercado laboral y de la organización de la pirámide demográfica nos muestran que ya son nueve las regiones en las que hay menos de dos cotizantes por pensionista.

La relación entre el número de ocupados y el de personas que reciben una pensión es fundamental el organismo de la Seguridad Social. El mínimo para garantizar que el sistema funciona es de dos frente a uno, es decir, dos cotizantes por cada pensionista, sin embargo, en España la media es de 1,9 actualmente.

Entre 1950 y 1970, se produjeron un gran número de nacimientos que dieron como resultado la conocida generación baby boomer. Si según han ido pasando los años, las tasas de natalidad se hubieran mantenido, no habría ningún problema, pero los nacimientos se han reducido considerablemente y los baby boomers han aumentado los datos de jubilación en un 50 %, alcanzando los 15 millones de pensionistas en España.

Futuro incierto

Las previsiones de cara a futuro son de todo menos prometedoras. Es un hecho que habrá cada vez menos trabajadores sosteniendo el sistema y que además se producirá un inevitable aumento de los gastos para pagar las pensiones.

El problema reside en el actual sistema de pensiones, ya que es insostenible, por lo que se deberían dar ayudas para fomentar la natalidad, apoyar a los jóvenes y a su vez reducir el tamaño de la administración pública.

El modelo de pensiones debería ser un fondo como tal. Los impuestos que paga un trabajador se emplean para pagar la pensión a una persona jubilada, y no como un fondo de pensiones para la jubilación futura de ese trabajador.

Además, una solución podría ser crear un nuevo modelo mixto para nuestras pensiones (de capitalización y de reparto). Un sistema que se base en solidaridad (garantizando una pensión mínima que se revalorice con el coste de la vida) y en la propiedad (asegurando el derecho de los ciudadanos a disponer de ahorros propios al finalizar su vida laboral que complementen con las pensiones mínimas).