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Oficinas de Charles Schwab en Dallas

Charles Schwab se prepara para ser el siguiente banco en caer en Estados Unidos

Debe el 130 % de su capital social en préstamos a corto plazo

El banco Charles Schwab está ganando posiciones para convertirse en la siguiente entidad financiera en caer en Estados Unidos tras las quiebras de Silicon Valley Bank, Signature y First Republic Bank. La compañía ha confirmado que debe el 130 % de su capital social en préstamos a corto plazo y ha anunciado recortes en plantillas y oficinas, un hecho que suele preceder a otras noticias negativas.

La firma ha señalado que su interés en reducir la plantilla se debe a la necesidad de contrarrestar el alza de costes, y que la medida va en línea de lo que están haciendo sus competidores de Wall Street, pero problemas como el de los préstamos a corto plazo hacen pensar en lo peor. La compañía no ha desvelado cuántos empleados pretende despedir.

Firmas importantes del mundo corporativo estadounidense, incluidos bancos de Wall Street, han recortado su plantilla este año con el objetivo de controlar sus costes en medio de una inflación que aún es alta, con tipos de interés crecientes y costes de financiación del endeudamiento más elevados.

La compañía ha tenido que recurrir a fuentes de financiación complementarias para contrarrestar un entorno económico más incierto. La empresa, con sede en Westlake, Texas, señalaba en junio que dependía de fuentes de financiación más caras para complementar su flujo de caja.

La firma indica que está evaluando sus activos inmobiliarios y que planea cerrar o disminuir determinadas oficinas corporativas. Espera ahorrar 500 millones de dólares anuales con estas acciones.

La compañía señala que la mayoría de los costes relacionados con los despidos se ejecutarán en la segunda mitad de 2023. En julio informó de una caída menor de la esperada en las ganancias del segundo trimestre. Aumentar las tarifas de la gestión de activos ayudó a suavizar el impacto de una disminución en los ingresos por intereses. A principios de año indicó que buscaba recaudar hasta 2.500 millones de dólares a través de una oferta de deuda.

El banco cerró el segundo trimestre de 2023 con un beneficio neto atribuido de 1.173 millones de dólares (1.044 millones de euros), un 29 % menos que en el mismo periodo de 2022. Sus depósitos disminuyeron un 6,5 % trimestral y un 31 % anual.

Sus ingresos netos disminuyeron un 8,6 % interanual entre abril y junio, hasta los 4.656 millones de dólares (4.144 millones de euros). Registraron una bajada del 10 % de los ingresos por intereses netos, que sumaron 2.290 millones de dólares (2.038 millones de euros). Los ingresos por comisiones de gestión subieron un 11,5 %, hasta 1.173 millones de dólares (1.044 millones de euros). Los depósitos al final del trimestre sumaron 304.400 millones de dólares (270.966 millones de euros), un 6,5% menos que al final del trimestre anterior, y un 31 % menos que en el mismo periodo de 2022.

El director financiero de Charles Schwab, Peter Crawford, admitió el 18 de julio que la firma «navega obstáculos significativos a corto plazo». Subrayaba, no obstante, que se observa una desaceleración continua y sustancial en el ritmo diario de las salidas de efectivo en comparación con los meses anteriores.