Jubilados
Los viajes del Imserso, suspendidos: motivos, plazos y cómo podría afectar a los usuarios
Las 900.000 plazas ofertadas para los viajeros no deberían reducirse a pesar de los retrasos que se están produciendo en su comercialización
Los viajes para mayores del Imserso no van a comenzar la temporada 2023/2024 en el calendario que tenían previsto. El bloqueo que se ha generado por la presentación de recursos contra el resultado de la licitación de los tres lotes del programa de Turismo Social, ha hecho que sea prácticamente imposible que las 900.000 plazas que ofreció el Ministerio de Derechos Sociales puedan comercializarse este mes.
Asimismo, los retrasos en su puesta en marcha pueden llegar hasta los tres meses. La principal razón de la anulación es porque tres de las empresas pujantes en el concurso de los lotes del programa de Turismo Social (Soltour, Seniorplan y Mundiplan), presentaron recursos ante el Tribunal Administrativo Central de Recursos Contractuales (Tacrc) contra la adjudicación de las tres licitaciones concedidas a Ávoris.
Es la primera vez que una sola empresa sale vencedora en todos los paquetes. Debido a este motivo, las otras creen que no se han puntuado las ofertas presentadas conforme a lo estipulado en los pliegos de contratación. El pasado 11 de septiembre, el Tacrc admitió a trámite las demandas presentadas, ya que «el análisis de los motivos que fundamentan la interposición de los citados recursos pone de manifiesto que los perjuicios que podrían derivarse del levantamiento de la suspensión son de difícil o imposible reparación».
¿Hasta cuando podría demorarse?
La resolución podría tardar hasta tres meses, por lo que no empezarían los viajes hasta diciembre. Todo dependerá de lo que tarde el organismo dependiente de Hacienda en emitir el fallo. Esto mismo ocurrió en la temporada 2021/2022 y en la 2015/2016 y ninguna invita al optimismo. En el primer caso comenzaron en enero y en el segundo no se empezó hasta noviembre a pesar de que los recursos estaban presentados desde el mes de julio.
En el sector turístico ya se están produciendo cierres anticipados de hoteles y despidos. Además, las 900.000 plazas ofertadas para los viajeros no deberían reducirse a pesar de los retrasos que se están produciendo en su comercialización, pero también dependerá de la demanda registrada y del número de hoteles que trabajen para el programa.
En la Comunidad Valenciana algunos han preferido cerrar hasta primavera que esperar abiertos durante estos meses sin clientela, un factor que podría llegar a tensionar la venta de la totalidad de las plazas. En este sentido, han prometido tres millones de euros en ayudas para los negocios afectados mientras dure la suspensión de estos viajes.