La ministra de Asuntos Económicos en funciones, Nadia Calviño.
Reunión en Santiago Calviño tratará de que los ministros de la UE relajen su exigencia sobre países tan endeudados como España
Alemania y Países Bajos querrán liderar la negociación
La ministra de Asuntos Económicos en funciones, Nadia Calviño, tratará desde hoy que los ministros de la UE que han acudido a Santiago de Compostela relajen sus criterios sobre el cumplimiento de la deuda y el déficit que vuelven a aplicarse en 2024. España rebasa estos criterios con amplitud, especialmente en el caso de la deuda: se sitúa en el 113 % sobre el PIB, cuando en principio la idea es volver progresivamente al límite que había antes de la pandemia, fijado en el 60 % del PIB.
Calviño ha asegurado que durante el verano ha trabajado «muy intensamente» con los ministros de la UE para ir fijando los aspectos técnicos de la reforma de las reglas fiscales, y ahora va a plantearles «pasar ya a la fase de negociación política para alcanzar cuanto antes el necesario consenso».
Las nuevas reglas fiscales serán uno de los puntos clave que se abordarán durante este fin de semana en la reunión informal que mantienen en Santiago de Compostela los ministros de los veintisiete países que componen la Unión Europea. Calviño estima que las reglas deben consensuarse en torno a un equilibrio adecuado entre la reducción sostenida de la deuda sobre el PIB para mantener unas finanzas sostenibles en el medio y largo plazo y la necesaria inversión e incentivos para abordar reformas estructurales.
Calviño aspira a sugerir un calendario ambicioso para poder llegar a un acuerdo antes de final de año y que las nuevas reglas se apliquen a partir de enero de 2024. Incide en que el acuerdo deberá conjugar el equilibrio entre el trato personalizado de las necesidades de cada país y el marco común de reducción de deudas sostenidas en el tiempo y que protejan la estabilidad fiscal y financiera de la UE en el medio y largo plazo.
La ministra en funciones intentará empujar en la línea que le interesa, pero países como Alemania y Países Bajos ya le han trasladado que quieren liderar la negociación del retorno a las normas fiscales, y serán muy exigentes.
Aunque la reunión de Santiago tiene en principio un carácter informal, la presidencia española se valdrá de ella probablemente para presentar una primera propuesta de acuerdo en la reunión de ministros de Economía que se celebrará el 17 de octubre en Luxemburgo.