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Pensiones 2024: la nueva edad de jubilación a partir del 1 de enero
El principal objetivo de las modificaciones en la edad de jubilación es tener una población más activa que ayude a retrasar el cobro de estas pensiones
La edad de jubilación ha ido retrasándose en la última década paulatinamente. De hecho, desde el pasado 2019, comenzó a incrementarse en dos meses para poder alcanzar los 67 años en el 2027. Esta medida, además de traer consigo una serie de consecuencias en el futuro más inmediato, hará que en el 2024 vuelva a verse incrementada en España.
La aprobación de la reforma de las pensiones en el mes de marzo incluyó aspectos novedosos como la cuota de solidaridad para las edades más altas, el mecanismo de equidad intergeneracional o la ampliación del periodo de cómputo para ampliar la pensión. Al mismo tiempo, a pesar de estas novedades, la edad de jubilación no cambia con esta reforma y los requisitos seguirán siendo los mismos para el próximo año.
Debido a este motivo, en 2024 se comenzará con una edad de jubilación incrementada. Actualmente, quien quiera retirarse con el 100% de la pensión deberá tener ya cumplidos los 66 años y cuatro meses. Asimismo, este 2023, aquellos que tengan una vida laboral larga podrán retirarse con su pensión integra a los 65 años (siempre que tengan cotizados más de 37 años y nueve meses).
Edad de jubilación en 2024
Siguiendo con la norma establecida esto cambiará con la llegada del próximo año, ya que sufrirá un incremento de dos meses. También será posible acceder a la jubilación anticipada de manera voluntaria hasta 24 meses antes de la edad legal de jubilación. Aun así, este sistema comporta penalizaciones para quienes se acojan a él.
Con el paso de los años la edad de jubilación ordinaria también se retrasará. Un ejemplo de ello es el 2025, año en el que la edad de jubilación se establecerá en 66 años y ocho meses. En el caso de tener 38 años y tres meses o más de periodos cotizados, la edad se quedan en 65 años. El principal objetivo es que en el 2027 la edad quede establecida en los 67 años.
Los sucesivos retrasos en la edad de jubilación van dirigidos a tener una población más activa que ayude a retrasar el cobro de las pensiones. Asimismo, uno de los grandes retos del sistema de pensiones sigue siendo su sostenibilidad, por lo que las sucesivas reformas y decisiones sobre la edad han ido encaminadas a poder paliar este hecho.