La guerra de Israel y Palestina amenaza al depósito de gasolina y dispara el petróleo más de un 3 %
La postura de Irán y Arabia Saudita en el conflicto será clave en una futura la escalada de precios
Cuando todo apuntaba a una bajada más pronunciada del precio de la gasolina por la caída del precio del petróleo, la guerra entre Israel y Hamás ha devuelto la inestabilidad al mercado de las materias primas.
La semana pasada el petróleo caía hasta 14 dólares y cotizaba a 83 dólares después de rozar los 97. La consecuencia directa era que el combustible no superaba la barrera psicológica de los dos euros, cuando los analistas anunciaban que podría hacerlo a finales de octubre.
100 dólares por barril
Los precios del petróleo se desplomaron por el temor a una desaceleración de la economía mundial y la posibilidad de que la OPEP y otros grandes exportadores no mantuvieran los recortes de producción el próximo año.
Goldman Sachs ya se ha pronunciado sobre el conflicto y ha augurado que no descenderá la producción, pero sí habrá nuevas subidas del precio de la gasolina a medio plazo. Sus analistas aseguran que «el riesgo a corto plazo para el suministro de petróleo es limitado», pero reiteran que los 100 dólares por barril se alcanzarán a mediados de 2024.
El primer lunes tras el ataque de Hamás a Israel y la guerra que se ha desatado en la zona ha supuesto que el barril de Brent se dispare un 5 % y ronde los 89 dólares. Esto lleva al referente del petróleo en Europa a recuperar parte de ese 11 % de caída que sufrió a finales de septiembre. Durante la jornada, no obstante, moderaba su ascenso hasta los 87 dólares, una revalorización del 3,3%.
La tensión política en Oriente Medio y la postura que tomen los países aliados marcará el futuro de petróleo y el precio de la gasolina durante las próximas semanas. Irán es un activo importante porque casi un 20 % del suministro de crudo a nivel mundial pasa por el Estrecho de Ormuz, según un informe del Departamento de Energía de Estados Unidos. Si su postura en favor de Gaza provoca sanciones, la ruta se vería afectada y los precios escalarían más.
Arabia Saudita
Goldman Sachs cifra en una subida de un dólar la cotización del Brent por cada 100.000 barriles de petróleo que se recorten a Irán en unas futuras sanciones por su postura en el conflicto.
El otro actor es Arabía Saudita. El juego político hasta antes del conflicto era el interés de Estados Unidos por sellar un acuerdo de defensa con Arabia que le protegiese de un enemigo histórico como Irán. El efecto dominó provocaría que las relaciones con Israel se normalizaran aunque, como explica Goldman Sachs «la probabilidad de que se normalicen las relaciones a corto plazo son muy reducidas».
A todo esto, la demanda mundial de petróleo será mayor de lo estimado anteriormente por la Organización de Países Productores de Petróleo, que ha revisado al alza su estimación de consumo a largo plazo. La OPEP ha advertido de que serán necesarias inversiones de 13,2 billones de euros en el sector petrolífero hasta 2024 para evitar «un caos energético y económico».
«Caos» energético
El cartel calcula que las necesidades de inversión para el sector petrolero en general, entre 2022 y 2045, se estiman en un total acumulado de 14 billones de dólares (13,2 billones de euros), o alrededor de 610.000 millones de dólares anuales de media (576.252 millones de euros).
«Si estas inversiones no se materializan, representa un desafío y un riesgo considerables para la estabilidad del mercado y la seguridad energética», advierte la OPEP.