Las calderas de condensación permitirán seguir utilizando gas
Calderas de gas El coste de 'jubilar' el gas en casa: «O gastas 1.500 euros en una caldera de condensación o 18.000 en aerotermia»
Reemplazar el parque actual de calderas –unos 11,1 millones de equipos– equivaldría a cerca de dos veces el gasto público nacional en Sanidad, según Sedigás
Sustituir el parque español de calderas de gas por bombas de calor tendría un coste cerca de dos veces superior al gasto público en Sanidad. Así lo ha cuantificado un informe de la consultora Arthur D. Little para la patronal Sedigás, que cifra en hasta 18.000 euros el coste de instalar un sistema de aerotermia.
El informe cuantifica en 201.314 millones de euros el impacto de reemplazar el parque actual de calderas –unos 11,1 millones de equipos entre los 8,9 millones de atmosféricas y los 2,2 millones de condensación–. Cabe recordar en este sentido que, debido a la reciente Directiva refundida de Eficiencia Energética, desde el 1 de enero de 2026 no habrá nuevas medidas de eficiencia energética para aquellos sistemas que utilicen combustibles fósiles. Ahora bien, según explicó el presidente de Sedigás, Joan Batalla, este jueves, la transposición de la ley europea «ni prohíbe ni fija fechas para eliminar calderas atmosféricas».
Batalla explica que «a nivel europeo, el sector residencial demanda el 40 % del gas. En cambio, en España el porcentaje es del 17 %. De ese 17 %, el 60 % corresponde a los sistemas de calefacción. Es decir, apenas un 10 % del total de la demanda de gas se corresponde con las necesidades del sector energético.
Por el contrario, el sector recuerda que la capacidad del sector eléctrico para satisfacer toda la demanda de calefacción en Europa ya ha sido puesto en cuestión por algunos expertos. En Alemania, Klaus Müller, presidente de la Agencia Federal de Redes, avisó en Die Welt de que «si se siguen instalando una gran cantidad de nuevas bombas de calor y estaciones de carga, podría haber problemas de sobrecarga y cortes de energía locales en la red de distribución si no actuamos».
La ley europea ni prohíbe ni fija fechas para eliminar calderas atmosféricasPresidente de Sedigas
Modelo español
Desde Sedigas, Batalla pone cordura entre quienes creen que habrá que someter a las viviendas a carísimas reformas para convertirlas en sostenibles. «Es posible descarbonizar la demanda de la calefacción simplemente con el biometano, que no requiere cambios en las calderas. No podemos descuidar la arquitectura de nuestras viviendas», explica y añade que «hay que apostar por lo que se ajusta a nuestras características como país y lo que se ajusta a nuestros recursos y a nuestra economía».
La sustitución del parque actual de calderas en España por bombas de calor como solución para la descarbonización residencial «no será posible en España», en su opinión, dado el tipo de edificación en el país y tendría un coste económico de 201.314 millones de euros.
El biometano es, a su juicio, la solución, pero en la red española ahora mismo es de «menos de un 1 %». En este sentido confía en que la hoja de ruta del biogás de la vuelta a esta situación. En España «solo existía la planta de Valdemingómez produciendo biometano y ya hay 12 más inyectando y 30 proyectos previstos. Hay interés porque es una solución circular y permite emisiones negativas de CO2 cuando se genera por purines (residuos orgánicos), por ejemplo», asegura.
Huyamos de que a mayor penetración de renovables el coste de la energía será ceroSocio de Arthur D. Little
Desde Bruselas «se estimaba que España produciría un 14 % más de biometano en 2030. Francia va a terminar con más de 600 plantas de producción este año. En Dinamarca cubre ahora un 60 % de demanda de gas y llegará al 100 % en unos años porque han sabido gestionar los residuos de las vacas para convertirlos en energía».
Luis del Barrio, socio práctica de Energía de Arthur D. Little asegura que «la caldera de condensación alimentada por gases renovables tiene grandes ventajas para alcanzar esos objetivos a menor coste, pero lo importante es que lo que tiene que ser renovable es el combustible».
Precio de la energía
«Las emisiones de la electricidad va a costar reducirlas por el cierre de las nucleares. Huyamos de que a mayor penetración de renovables el coste de la energía será cero», aseguró Del Barrio. «Los equipos de almacenamiento eléctrico para acumular energía y utilizarla por la noche son muy caros», consideró. Desde hace un par de años no es más barata la electricidad en los tramos nocturnos, el ahorro real se consigue en las horas centrales del día que es donde más aportan las renovables mientras que por la noche entran los ciclos combinados y aumenta el precio.
«La aerotermia no se puede adaptar a todos los países porque se necesitan grandes espacios de habitabilidad y factores económicos que no se dan en España. Si se cambia una caldera por una de condensación se reduce un 30 % el consumo», explica.
Es más fácil tener 1.500 euros ahorrados que cambiar el sistema enteroSocio de Arthur D. Little
Económicamente el problema se multiplica cuando se quiere descarbonizar una vivienda. «Es más fácil tener 1.500 euros ahorrados que cambiar el sistema entero, el ahorro neto español es de 9.000 euros mientras que la bomba de calor me va a costar 18.000 euros por el suelo radiante con aerotermia y solo encajaría en cocinas de 105 m2 porque la maquina tiene el tamaño de una nevera. Aunque la subvención llega a 5.000 euros, la barrera económica es significativa», zanja.
Según Batalla y Del Barrio «la red pasará de ser de Gas Natural a ser de biometano y de hidrogeno. La red de gas apenas necesita inversión para introducir el biometano. Para el hidrogeno habrá que hacer inversiones más sustanciosas, pero en todo caso marginales».