¿Cuánto subirá el Salario Mínimo con el nuevo Gobierno? Lo que quiere Díaz y lo que exigen los sindicatos

El Salario Mínimo Interprofesional (SMI) vuelve a la actualidad política española una vez que la investidura de Pedro Sánchez se podría perpetrar el próximo 16 de noviembre. Yolanda Díaz y los sindicatos ya preparan una nueva vuelta de tuerca al sueldo mínimo y la patronal espera, al menos, ser incluida en las conversaciones con los agentes sociales que ha prometido la vicepresidenta en funciones.

El pacto del PSOE y Sumar para formar Gobierno incluye la subida del SMI, la histórica lucha de Yolanda Díaz que ya logró aumentarlo hasta los actuales 1.080 euros y que suma un alza del 47 % desde 2018 cuando se situaba en 735,9 euros.

Hace unas semanas, la vicepresidenta en funciones deslizó tras ese acuerdo que el nuevo salario mínimo rondaría los 1.545 euros, la mediana salarial, un 43 % más alto que el actual, y muy por encima de lo inicialmente previsto por CC.OO. y UGT.

Patronal y sindicatos

La patronal apenas cuenta para estas decisiones. Hay que recordar que en la última subida de 2023 la CEOE no acudió a la reunión con Trabajo porque aseguraba que «no se dan las condiciones». En este caso, el aumento propuesto por Díaz supondría un aumento de los costes laborales de casi 3.800 millones de euros al año para los empresarios. Un trabajador que cobra 1.080 euros de SMI le cuesta al empleador 1.650 euros. En caso de aumentarlo hasta los 1.545 euros, estos costes ascenderían a los 2.350 euros y eso es inasumible para muchas pymes.

Los sindicatos son más cautos con la subida del SMI. El secretario general de UGT, Pepe Álvarez, ha expresado públicamente que el SMI, se debería elevar en España en 2024 a 1.200 euros, que sería el 60 % del salario medio, «tal y como sitúa la Carta Social Europea».

Un trabajador que cobra 1.080 euros de SMI le cuesta al empleador 1.650 euros

Desde UGT esperan la investidura de Sánchez para seguir su postura siempre cercana a los gobiernos de izquierdas que, durante la pasada legislatura, tuvo su máxima sumisión en agosto de 2022 cuando propusieron una huelga contra la patronal por su postura en la negociación salarial. Yolanda Díaz les apoyó argumentando que «tienen toda la razón para salir a la calle a movilizarse contra la patronal».

Desde CC.OO no se atreven con una cifra. Tampoco Unai Sordo ha hablado sobre este asunto y se limitan a un comunicado firmado por la secretaria de Acción Sindical y Empleo de CC.OO, Mari Cruz Vicente donde asegura que su sindicato considera que todavía hay margen para subir los salarios, ya que «las empresas están obteniendo un margen de beneficios un 53 % superior que antes de la pandemia» y además ha aumentado la productividad.

Ahora la negociación entre el ala más dura del Gobierno, la de Sumar, y los sindicatos será la que decida qué subida del SMI proponen, si los 1.545 euros que filtra Yolanda Díaz o los 1.200 euros de Pepe Álvarez.

Paro juvenil

En cualquier caso, el continuo aumento del SMI tiene efectos negativos para el paro juvenil, uno de los mayores problemas que acarrea España ya que 4 de cada 10 desempleados de menos de 25 años en Europa son españoles. En los últimos informes de empleo de Randstad, su director de comunicaciones institucionales Luis Pérez avisó de que subir el SMI «puede terminar condenando al desempleo a los colectivos que en teoría se pretende proteger con esta medida: por ejemplo, el de los jóvenes, especialmente los que tienen menos formación».

A esto hay que añadir otra situación comprometida que el Gobierno nunca ha afrontado: las horas trabajadas. La contratación parcial o discontinua aumenta y «eso da lugar al pluriempleo para cubrir las necesidades económicas».

Todo indica a que el SMI volverá a aumentar y lo hará sin acuerdo total y sin que se solucionen otros problemas económicos y laborales que lastran a España.