De Cos avisa de que habrá que tomar nuevas medidas para apuntalar la sostenibilidad de las pensiones
Como consecuencia de los distintos cambios legislativos aprobados desde 2021, el sistema de pensiones español tendrá que asumir, a largo plazo, mayores obligaciones de gasto que no se verán compensadas en su totalidad por los ingresos obtenidos
El gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, ha advertido de que habrá que adoptar nuevas medidas para apuntalar la sostenibilidad financiera del sistema público de pensiones. Considera que es necesaria una evaluación «transparente, continua y exhaustiva» de los efectos de estas reformas impulsadas, incluido su impacto en la equidad intergeneracional.
Según ha alertado el gobernador durante su intervención en la Conference on Ageing, organizada por Banco de España, CEMFI y Georgetown University, se está produciendo un importante cambio demográfico que se acelerará a medida que avance el siglo XXI.
El gobernador ha avisado de que un cambio demográfico tan grande podría tener profundas repercusiones económicas, con consecuencias incluso para la eficacia de las políticas monetarias y fiscales. «Junto con el impacto del cambio tecnológico y climático es probable que represente el mayor reto al que se enfrenten las políticas económicas y sociales en las próximas décadas», ha alertado Hernández de Cos.
A medida que crece la población jubilada y si las prestaciones per cápita se mantienen constantes, las transferencias a través de del sistema público de pensiones aumentarán. Además, cuanto menor sea la proporción de población en edad de trabajar menores serán, en términos relativos, los ingresos procedentes de las cotizaciones a la Seguridad Social utilizados para financiar las prestaciones sociales contributivas.
Además, a medida que la población envejece, aumenta la demanda de servicios públicos sanitarios y de cuidados de larga duración.
De hecho, la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF) prevé que el gasto total en pensiones en España aumente desde el 13 % del PIB actual al 16,2 % en 2050. El aumento del gasto sanitario sobre el PIB también se prevé considerable, con un incremento de casi 1,5 puntos porcentuales en las próximas tres décadas, según las previsiones del último informe de la Comisión Europea.
El gobernador ha recordado que en la última década el sistema de pensiones ha sido objeto de una serie de reformas, principalmente encaminadas a aumentar la edad efectiva de jubilación, apuntalar los ingresos de la Seguridad Social e introducir un mecanismo de ajuste automático.
«La estimación del impacto que las distintas medidas aprobadas pueden tener sobre los ingresos y gastos del sistema en las próximas décadas está sujeta a mucha incertidumbre», ha reconocido.
En cualquier caso, Hernández de Cos ha apuntado que el amplio abanico de estimaciones disponibles -del Banco de España y de otras instituciones- sugiere que, como consecuencia de los distintos cambios legislativos aprobados desde 2021, el sistema de pensiones español tendrá que asumir, a largo plazo, mayores obligaciones de gasto que no se verán compensadas en su totalidad por los ingresos obtenidos.
Otra incertidumbre, según el gobernador, es el posible impacto adverso del aumento de las cotizaciones a la Seguridad Social sobre el empleo, los salarios y la competitividad.
Según estas estimaciones, habrá que adoptar nuevas medidas para apuntalar la sostenibilidad financiera del sistema. Y, en cualquier caso, es necesaria una evaluación transparente, continua y exhaustiva de los efectos de estas reformas, incluido su impacto en la equidad intergeneracional.