Calviño, Rodríguez, Montero y, en segundo plano, Escrivá, tras un Consejo de Ministros
Escrivá asume con Transformación Digital parte de las competencias de Calviño a la espera de su marcha al BEI
Gestionará dos de las tres secretarías de Estado hasta ahora en manos de la vicepresidenta económica en un Gobierno con hasta diez ministerios 'económicos'
José Luis Escrivá, hasta ahora ministro de Seguridad Social, asume parte de las competencias de Nadia Calviño. En concreto, el área de Transformación Digital, que engloba dos de las tres secretarías de Estado que hasta ahora gestionaba la vicepresidenta económica: Digitalización e Inteligencia Artificial y Telecomunicaciones e Infraestructuras Digitales.
Calviño no obstante repite al frente de la política económica de España y de una de las vicepresidencias del Ejecutivo, a la espera de conocer el próximo 8 de diciembre quién presidirá el Banco Europeo de Inversiones (BEI), puesto al que aspira.
Escrivá, economista y ministro desde 2020, fue jefe del servicio de Estudios de BBVA, BBVA Research. También presidió la Autoridad Fiscal Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF) entre 2014 y 2020 y presidió la Red de Instituciones Fiscales Independientes de la Unión Europea entre 2015 y 2019.
Muy combativo, en particular en la red social X, y con fama de no morderse la lengua, fue uno de los grandes impulsores del Ingreso Mínimo Vital (IMV). Entre sus últimas aportaciones a la cartera de Seguridad Social, la puesta en marcha del Mecanismo de Equidad Intergeneracional para paliar el desajuste entre los ingresos de la Seguridad Social, así como el destope de las bases de cotización. Algo que, según sus previsiones, cuestionadas por excesivamente optimistas, permitirían garantizar la sostenibilidad de las pensiones en las próximas décadas.
Entre sus grandes retos estará abordar la transformación de las compañías de telecomunicaciones en un momento en el que Telefónica afronta la entrada en su accionariado de la saudí STC y el fondo Zegona acaba de adquirir Vodafone en España. El presidente de la primera, José María Álvarez-Pallete, reclamaba hace escasos días que el sector «que se nos desregule, que se nos deje competir». Una reclamación que encontraba eco en los sindicatos: el sector debe «dejar de estar sometido al corsé victoriano de las regulaciones», según CC.OO.
Calviño, por su parte, conserva Economía y Apoyo a la Empresa y se mantiene, por tanto, como máxima responsable económica. En el interín asumirá también la cartera de Comercio, que se desgaja de Industria, y que recibirá de las manos de un breve Héctor Gómez, que apenas ha permanecido siete meses al frente de la cartera.
Lo hará al menos hasta el próximo 8 de diciembre, cuando se dirimirá si, como parece, toma el testigo de Werner Hoyer al frente del Banco Europeo de Inversiones. Un puesto para el que pugna con la liberal danesa Magrethe Vestager, pero para el que ya se ha asegurado el apoyo de Alemania, principal sostén presupuestario del BEI.
Perteneciente al Cuerpo de Técnicos Comerciales y Economistas del Estado, Calviño, licenciada en Economía por la Universidad Complutense de Madrid y en Derecho por la UNED, ya ocupó cargos de responsabilidad en Economía durante el mandato de Pedro Solbes y bajo la presidencia de Rodríguez Zapatero. Entonces fue directora general de Defensa de la Competencia, dependiente del departamento económico, entre mayo de 2004 y agosto de 2006, tuviendo que lidiar, entre otros, con la OPA de Endesa.
Diez ministerios económicos
El nuevo Ejecutivo tendrá así un diez ministerios de un total de 22 con competencias en materias económicas. Tras Nadia Calviño, Yolanda Díaz continuará gestionando Trabajo y la vicepresidencia segunda del Ejecutivo; Teresa Ribera, Transición Ecológica con las competencias de Energía; María Jesús Montero, Hacienda y la vicepresidencia cuarta; Transición Digital de Escrivá; Isabel Rodríguez, Vivienda; Luis Planas, Agricultura; Elma Saiz, Seguridad Social; Oscar Puente, Transportes; y Jordi Hereu, Industria.
Saiz, hasta ahora portavoz socialista en el Ayuntamiento de Pamplona, tendrá que tomar el testigo de Escrivá y lidiar con las reformas puestas en marcha por el hasta ahora titular de la cartera. En particular la reforma de las pensiones, tras recuperarse su revalorización con el IPC, revisó el modelo de jubilaciones anticipadas e introdujo mayores incentivos para retrasar el retiro del mercado laboral al objeto de acercar la edad efectiva de jubilación a la edad legal. También el nuevo Mecanismo de Equidad Intergeneracional, que entró en vigor el pasado enero, que establece una nueva cotización del 0,6 % que irá subiendo hasta el 1,2 de forma progresiva hasta 2026.
La segunda pata de la reforma de pensiones, aprobada en marzo de este año y centrada en la obtención de ingresos, contempla subidas de bases máximas y cotizaciones, mejoras en las pensiones mínimas y el establecimiento progresivo, a partir de 2027, de un modelo dual para calcular la pensión, con la posibilidad de elegir entre los últimos 25 años cotizados o 29 años, descartando en este último caso los dos peores.