Las compras de Iberdrola, las cuentas de Montero y 10.000 millones en el aire por el «no» de Junts a Sánchez

Sigue coleando el decreto ley anticrisis Omnibus aprobado con Navidad y alevosía la semana pasada. Y no solo por la negativa de Junts a apoyar su convalidación parlamentaria sino porque su aprobación resulta vital para solicitar el cuarto desembolso de los fondos europeos: 10.000 millones de euros, ya pactados con la Comisión Europea. Pero Junts, que ve algún artículo que «paralizaría» la amnistía, no es el único que pone pegas.

Fedea (Fundación de Estudios de Economía Aplicada) también se ha enfadado porque estas medidas se hayan concretado en un decreto aprobado de manera urgente. Como si fuera la primera vez que Pedro Sánchez utiliza el decretazo para aprobar leyes de sospechosa urgencia. Ni siquiera Carlos Cuerpo, alias El zapatillas, flamante ministro de Economía, Comercio y Empresa, tuvo tiempo de introducir todos los cambios que quería. ¡Qué tiempos aquellos en los que las ministras de José Luis Rodríguez Zapatero eran portada y abrían a doble página el Vogue!.

Pero volvamos al decretazo. Fedea, en un informe de José Luis García Díez, ha hecho sus tareas y calculado el coste de la subida del subsidio de desempleo hasta los 570 euros desde los 480 actuales. Y dice que si los beneficiarios fueran 400.000, como se prevé, el coste para las arcas públicas sería de 2.500 millones de euros: 0,17 puntos del PIB. También critica que el decretazo se haya aprobado sin los correspondientes informes vinculantes y consultivos pues, señalan con razón que no entrará en vigor hasta el mes de junio. Y la puntilla final: «El objetivo del gobierno de mejorar la empleabilidad de los que perciben el subsidio parece lejos de cumplirse debido al desequilibrio entre los muy definidos derechos y las poco concretas obligaciones». Pues eso.

Pero no todo es malo. Nadia Calviño, antes de irse al Banco Europeo de Inversión, ya había dejado su huella en el decreto. Y como sabía que iba a perder la batalla contra Yolanda Díaz coló en la letra pequeña su venganza: se podría compatibilizar un salario a tiempo parcial con el cobro de la prestación pero… pero solo durante seis meses, a partir de los cuales la cantidad irá disminuyendo paulatinamente. Juegos florales visto el coste que calcula Fedea, pero Nadia se quería ir ganando y dejar al Zapatillas bien colocado de cara a los Presupuestos.

Nadia se quería ir ganando y dejar al zapatillas bien colocado de cara a los Presupuestos

Y hablando de ellos, hemos arrancado el año con los Presupuestos de 2023 prorrogados. Pensábamos que tanta negociación con Sumar, Junts, Esquerra, Bildu, PNV y demás incluía un apoyo a las Cuentas del Reino por aquello de las prebendas y condonaciones de la deuda. Y aunque parece que va a ser así, las cuentas no le salen a María Jesús Montero.

De entrada, arranca con un presupuesto de 380.000 millones pero mermados por los criterios de aplicación de la prórroga. Pero hay más. Montero diseñó estos cálculos sobre una economía española que crecería en 2024 un 2,5 %, cosa que no va a ocurrir. Según los cálculos más recientes de la OCDE (Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico) el crecimiento se ha desacelerado hasta el 1,5 %. Y si a eso le sumamos que Montero quería reducir la deuda del 3,9 % al 3 %, y que la inflación, como ha recordado estos días el Gobernador del Banco de España, va a seguir dando guerra –en diciembre subió de nuevo cinco décimas– solo ve posible el responsable de organismo regulador una política fiscal restrictiva que incluya menos gasto. Y esto lo dice Pablo Hernández de Cos cuando se va –deja la presidencia del Banco de España en junio– advirtiendo de paso una reducción del crecimiento hasta el 0,8 %. El 1,5 % de la OCDE solo lo ve posible en 2025. Todo un panorama.

Por eso lo va a tener difícil Montero, aunque siga haciendo caja histórica en las declaraciones del IRPF. Pero exprimir al contribuyente y a las empresas no crea puestos de trabajo. Y aunque se empeñen en vender que el mercado laboral está como nunca, ya sabemos que cuatro de cada diez empleos creados en 2023 fueron en el sector público: educación y sanidad. Y eso que las elecciones frenaron muchas convocatorias de empleo.

Y mientras la contratación pública se dispara, sectores como la hostelería, la industria, o la construcción destruyeron empleo en las últimas semanas. Y Yolanda Díaz aún sigue sin decir cuántos fijos-discontinuos están inactivos cada mes. Pero a este tema nos referiremos otro día.

Iberdrola y los Reyes Magos

Y hablando de industria, la semana pasada Iberdrola renunció a comprar la estadounidense PNM Resources. La eléctrica española, la mayor europea por valor en Bolsa, había anunciado en 2020 la adquisición de la compañía de Nuevo México por 7.500 millones de euros, pero el regulador se opuso.

El pasado martes, tres años y medio después, Avangrid, sociedad participada en un 81,5% por Iberdrola, anunció su decisión de «resolver el contrato de fusión (…) al no haberse cumplido en el plazo contemplado al efecto las condiciones previstas (…) para el cierre de la operación».

La bolsa española ha recibido bastante bien la noticia, sobre todo porque viene acompañada por la puesta en marcha de Vineyard Wind, el primer parque eólico marino de Iberdrola en Estados Unidos, y por la noticia de que la empresa eleva un 12,2 % el dividendo a cuenta a tres meses de presentar su nuevo plan estratégico.

La liquidez de la compañía presagia además unos Reyes Magos de compras en Estados Unidos y Reino Unido. A las que se podrían sumar inversiones en Galicia si el intervencionismo de Pedro Sánchez en el sector eléctrico lo permite. Recuerden también lo que les decía hace unos días sobre las líneas de crédito de Iberdrola. Mucho dinero para invertir. Lo veremos.

La liquidez de la compañía presagia unos Reyes Magos de compras en EE.UU. y Reino Unido

Y hablando de Reyes Magos. Esperemos que ayer le trajeran a Carlos Cuerpo unos zapatos. Los va a necesitar para la reunión informal de Ministros de Comercio en Bruselas los próximos 22 y 23 de enero. Aunque como es informal, lo mismo aparece en chanclas. Ya hay ambiente entre sus colegas de la Unión. No es para menos.