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Una persona con mascarilla junto a un centro de salud en Madrid, ayerEFE

Preocupación en las empresas por la autobaja de tres días con el absentismo disparado: «Amenaza la productividad»

Los empresarios reclaman «mecanismos para evitar malos usos» y avisan de que les obligarán a asumir «determinados supuestos fraudulentos»

La recuperación de las autobajas laborales de tres días, propuesta ayer por la ministra de Sanidad, Mónica García, enciende las alarmas en los departamentos de recursos humanos. La propuesta de Sanidad pasa porque sea el empleado quién pueda «justificar una enfermedad leve» mediante una declaración responsable, sin tener que acudir al centro de salud. Dicho procedimiento, sin embargo, deja una puerta abierta a un incremento del absentismo no justificado que acabe agravando el problema de competitividad de la economía española.

La medida precisamente llega cuando diversos indicadores muestran un continuo alza del absentismo. Según Adecco, en el tercer trimestre repuntó en 0,3 puntos porcentuales respecto al mismo período del año anterior, y en igual cuantía en comparación con el mismo período del año anterior. En algunos sectores, como en la industria, los niveles de absentismo «son un 50 % superiores a los que teníamos antes de la pandemia», alertaba recientemente el presidente de la patronal automovilística Anfac y de Seat, Wayne Griffiths.

La posible aprobación de las autobajas «preocupa mucho», reconoce a El Debate el responsable de RR.HH. de una empresa de más de 50 trabajadores con experiencia en el sector, que anticipa «un fuerte impacto en la productividad» de las empresas. La medida, detalla, tendrá una afectación especialmente elevada entre los empleados menos cualificados, pero también entre aquellos con más antigüedad, ante la «desaparición de la barrera» que supone tener que someterse a un examen médico que justifique la necesidad de la medida. Asimismo, adelanta que causaría un incremento de los costes laborales, derivado de la búsqueda de sustitutos para puestos que no puedan quedarse sin cubrir, con un aumento de la temporalidad como consecuencia derivada.

El absentismo laboral no ha parado de crecer en España desde 2015, según la estadística Ocupados por número de horas efectivas trabajadas en la semana en el empleo principal, sexo y situación profesional. Sus datos, no obstante, incluyen también vacaciones o ERTEs, que sí criba Adecco para elaborar su indicador. «Es un error equiparar el absentismo con faltas injustificadas. Lógicamente, las horas perdidas por esta razón son una parte del absentismo, pero no son la porción más importante. También se incluyen dentro del absentismo, por ejemplo, las horas no trabajadas por maternidad y adopción, por permisos remunerados y por conflictividad laboral», detallan.

Javier Pradilla, secretario de Estado de Sanidad, justificó ayer la medida para mejorar la eficiencia del sistema sanitario, en un escenario de constante incremento por el repunte de virus respiratorios. «Si el trabajador no necesita atención clínica, no puede ser que vaya al médico solo a la justificación», aseguró en la red social X. Según destacó, la autobaja ya está vigente en países como Reino Unido o Portugal.

«La baja laboral de tres días sin necesidad de justificante ya se aplica en otros países», corrobora a este periódico José María Torres, presidente de la asociación de pymes Conpymes. «Si se trata de evitar el colapso de nuestra sanidad que padecemos actualmente, por supuesto que estamos de acuerdo, pero al mismo tiempo se deben implementar mecanismos para evitar malos usos de estas autobajas», reclama. Y recuerda que el absentismo laboral por razones médicas «se ha duplicado en la última década lo que aumenta el problema de la productividad que tiene España. Esto es un grave problema para las empresas y para la economía de nuestro país».

«Se deben implantar mecanismos para evitar malos usos de estas autobajas»

La patronal Foment del Treball también criticó este lunes la propuesta de Sanidad, que a su juicio carece de «cobertura jurídica» y obligará a las empresas a «asumir determinados supuestos fraudulentos». Su aprobación, añadió la también catalana Cecot, debe aprobarse en el marco del diálogo social. Un diálogo social que precisamente ayer el Gobierno tensaba al máximo al negarse a trasladar a los contratos públicos la nueva subida salarial que prevé trasladar a los empresarios, como le reclama CEOE y Cepyme.

No aplicar medidas también redundaría en un alza del absentismo, como explica a El Debate María Teresa Coiras, profesora y experta en Virología de la Universidad Europea. «Si la situación de diseminación de enfermedades respiratorias aumentara por encima de los niveles normales, podrían producirse más casos de los habituales que influyeran en un aumento en el absentismo laboral». La experta recomienda no obstante la utilización de mascarillas para personas enfermas o mayores de 65 años o con alguna condición de inmunodeficiencia, pero ni siquiera «un uso continuado e indiscriminado por personas sanas».

En la actualidad el período de baja laboral por incapacidad temporal (IT) empieza con la baja del médico o un justificante. Los tres primeros días no están cubiertos por la Seguridad Social, aunque muchos convenios contemplan que la empresa pague el salario en su totalidad o en parte, según recuerdan desde UGT. Desde el día 4 hasta el día 20 se percibe un 60 % de la base reguladora y, a partir del día 21, un 75 % por parte de la Seguridad Social o de la Mutua correspondiente.