Las pensiones mínimas subirán entre un 5,8 % y un 6,9 % por el nuevo método de cálculo

El Gobierno quiere establecer un nuevo marco para la revalorización de las pensiones mínimas y no contributivas en base a la renta mediana y el umbral de pobreza.

Concretamente, la idea es converger de aquí a 2027 las subidas de las pensiones mínimas con el 60 % de la renta mediana de un hogar con dos adultos, y del 75 % del umbral de la pobreza de un hogar unipersonal en el caso de las no contributivas.

Así, el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones calcula que las pensiones mínimas subirán entre un 5,8 % y un 6,9 %, llegando en algunos supuestos al 14,1 %, según ha explicado Elma Saiz durante su comparecencia en el Congreso.

«Los pensionistas tienen garantizado el mantenimiento de su poder adquisitivo», ha añadido Saiz, que ha recordado que las revalorizaciones de las pensiones contributivas en 2022 y 2023 estuvieron sujetas al IPC.

El umbral de pobreza está establecido en el 60 % de la mediana de los ingresos anuales por unidad de consumo –o renta equivalente– de todos los hogares a nivel nacional.

Al tratarse de una medida relativa, su valor depende de cómo se distribuya la renta entre la población, por lo que este umbral aumenta o disminuye en la medida en que lo haga la mediana de los ingresos en cada año. En el caso de la revalorización de las pensiones no contributivas, ese 75 % del umbral de la pobreza correspondería al 45 % de la mediana de los ingresos anuales.

Este método tiene sus deficiencias ya que la renta mediana se calcula en base a los datos del año anterior, por lo que la revalorización automática provoca una ligera pérdida de poder adquisitivo por la diferencia inflacionaria entre año y año. Precisamente esta era una de las principales críticas de los sindicatos a la propuesta del Gobierno de vincular el SMI con el 60 % del salario medio.