En 65 meses, 446.000 millones de deuda: así gestiona Sánchez

Hace unos días el Banco de España publicaba la deuda bajo el Protocolo de Déficit Excesivo del mes de noviembre tanto consolidada como sin consolidar. Y tenía ganas, sinceramente, de ver como evolucionaba la deuda que genera solo nuestro querido presidente, ese que es capaz de decir que hoy una cosa es blanca y al día siguiente que es negra, pero eso sí, sin mentir, simplemente porque ha cambiado de opinión.

El problema es que como no sabemos a quién quiere hacer el bien, pues no terminamos de entenderle. Primero quería traer al fugado catalán de impresentable nombre que huyó cobardemente metido en un maletero, a que fuese juzgado por el Tribunal Supremo. Ahora también lo quiere traer, en eso no ha cambiado de opinión, pero en el «su» Falcon, bueno del ejército español, y pasearlo por la Castellana en un desfile lleno de madrileños que le vitoreen juntos, como lo hicieron con Perón y Evita por las calles de Buenos Aires.

Pero me da que esto no va a ser posible. Entre otras cosas, porque el pueblo de Madrid no quiere nada a este Adonis de la política que cree que con una caída de ojos ya te ha conquistado. Porque entre otras cosas, nuestro presidente se ha ganado a pulso la pérdida total y absoluta de credibilidad de la sociedad a la que ha intentado adormecer con 446.000 millones de deuda para pagar todos sus caprichos.

Eso sí, los 446.000 millones en que nos ha endeudado y que le han servido para pagar miles de prebendas, cheques culturales, bonos para los 18 años, ingresos mínimos vitales, tener adormecidas con millones de ingresos en publicidad a las cadenas de radio y TV, comprado medios a troche y moche y, así todo, sigue sin poder pasear solo por su país.

Vean ustedes lo que ha sucedido con nuestra deuda, desde que en junio de 2018 ganó en el Congreso de los Diputados, la moción de censura:

A 30 de junio, que podríamos decir que es la fecha última de gasto adjudicable a Rajoy, la deuda de la Administración Central del Estado era 1,021 billones a los que había que sumar 69.162 millones de los Organismos Públicos dependientes del Estado (ejemplo Correos, que está de moda), y a su vez la Seguridad Social que tenía un agujero, en aquellos momentos, de 34.888 millones.

Justo 65 meses después, sin que Pedro Sánchez haya dejado de sentarse en la poltrona de la presidencia del Gobierno, la deuda de la Administración Central se ha ido a 1,414 billones con una subida de 393.069 millones de euros, una auténtica barbaridad. Los Organismos Públicos consiguen entre todos y de media reducir 28.406 millones, gracias a los AENA o Loterías del Estado pero desde luego no gracias a Correos.

Y además, gracias a la brillante gestión de un experto como José Luis Escrivá, la deuda de la Seguridad Social se ha disparado hasta los 116.172 millones. Esto ha supuesto endeudarse a este Organismo en 81.284 millones.

Para aquellos que no tienen sensación de que esto es una animalada, me he permitido crear la siguiente tabla que ayuda a entender mejor lo que ha hecho este siniestro personaje que nos ha tocado en suerte:

Este incremento de la deuda, que se ha producido por la nula capacidad de gestión y de control del dinero de los españoles, equivale a que cada mes Sánchez se ha gastado 6.860 millones de euros más de lo que debía, ¡todos los meses ha derrochado 6.860 millones de euros!

Para que se hagan una idea, con ese dinero en un solo mes podríamos haber construido ocho hospitales tipo La Paz en ocho ciudades españolas, 100 % equipados con las últimas tecnologías médicas.

Esto también se puede mirar desde el punto de vista que todos los días de estos 65 meses se ha gastado de más 228,7 millones de euros. Construir un centro de salud con un hospital de día cuesta unos 5 millones y equiparlo con 5 médicos, 8 enfermeras, 8 auxiliares y 3 secretarias, costaría 1,5 millones de euros al mes, con esto pagaríamos 35 centros de atención primaria cada día.

Este gobierno, está generando una deuda cada hora que pasa de 9,5 millones de euros, así que con la deuda de 1 hora podríamos resolver el problema anual de 240 enfermos de ELA. Y así podría seguir buscando ejemplos en a que dedicar los 158.813 euros deuda que produce su «Sanchidad» cada minuto desde que llegó a la Moncloa o a los 2.647 euros en que nos endeuda cada segundo, de estos 65 meses de aguante que llevamos los españoles.

Esto es Pedro Sánchez, un ser que solo sirve para gastar.